Mindy Glazer, la celebre juez que le recordó a un excompañero de escuela que habían estudiado juntos, casualmente volvió a reconocer a otra persona. Esta vez fue a un chico al que vio en un crucero por el caribe:
-¿Tuvo un agradable crucero?, preguntó la juez
-¿Usted estuvo en el viaje pasado?, preguntó el acusado
-Sí, sí. ¿No me vio bailar?, ¿Usted estuvo bailando?, yo lo vi desde la cubierta.
La juez siguió con el caso, pero se lo hizo más ameno. Dándole entre frase y frase, lo bueno de ser una gran persona, de las virtudes que da la libertad y el portarse bien.