El búmeran es un juguete que se convirtió en un arma que tras ser lanzada si no impacta en el objetivo, regresa a su punto de origen.
La justicia especial para la paz se está convirtiendo en una guerra literaria vengadora, que traerá consecuencias nefastas para muchos actores de los problemas dejados a través del desorden público de muchos años de enfrentamientos de insurgentes y lógicamente de muchos excesos de militares y civiles con poder y mando, que no respetaron al pueblo, causándoles grandes heridas psicológicas a víctimas inocentes.
En los enfrentamientos de militares, guerrilleros, paramilitares, dirigidos al parecer por el dios dinero de gamonales y políticos con poder, perdieron la vida y propiedades muchas personas inocentes en un conflicto armado, que no fue más que el resultado de la búsqueda de figurar en la historia como celebres sin serlo, pues estos personajes no hicieron las cosas bien para hacer grande a Colombia.
El pueblo no es tonto y sabe que todo está falacia histórica lo único que hará será abrir más heridas, odios y enfrentamientos, que afectarán lo que siempre se ha buscado, que es una paz verdadera y duradera. Hasta el papa está incluido en los embustes. La conciliación, el amor y todo lo bueno quedara en la basura de las redes sociales que solo trae palabras ociosas y vulgares que mal informan y crean estados de enfrentamiento de ignorantes que no analizan la realidad del país.
Seguramente la JEP, cuyos integrantes fueron nombrados por extranjeros, ignorando a nuestros valores nacionales, será corrupta, como toda la justicia. Recordará la muerte de insurgentes próceres para sus seguidores, la invasión de países, y el sinnúmero de delitos ciertos y de mentiras convertirán a Colombia en una batalla que traerá presos, y extraditados, en donde se verá de todo, como inocentes condenados en cárceles inventadas porque no existen y criminales libres.
¿A cuántos funcionarios públicos, civiles de bien, militares e insurgentes perseguirá el búmeran? ¿La serpiente venenosa con su verborrea acabará con la libertad y la alegría que le queda al pueblo colombiano, que igual no ha sabido intervenir para acabar con la podredumbre que entierra a nuestra hermosa Colombia?