Como una cachetada recibió el empresario barranquillero Alex Saab su reclusión en Cabo Verde. Es que su avión personal había parado súbitamente para aprovisionarse de combustible, una pequeña escala que no iba a tener mayores consecuencias si no lo hubieran detenido, acusado de lavados de activos, enriquecimiento ilícito, exportación e importación ficticia. Desde el momento ha sido el tema candente no sólo en Venezuela sino también en Colombia.
El escándalo de las CLAP y del tráfico del oro venezolano, convirtieron a Saab en uno de los socios más polémicos y cuestionados de Maduro. Estados Unidos está pidiendo su extradición a ese país pero Venezuela ha lanzando una ofensiva diplomática para liberarle. Mientras tanto Saab se queda del lugar donde está. Es que desde que lo agarraron está sufriendo en su celda. No sólo la humedad sino los chiches, las hormigas y la comida le están afectando su salud, ya maltrecha por la hipertensión arterial.
La pareja de Alex Saab es la modelo Camila Fabri, quien no ha emitido ninguna declaración en el tiempo que ha durado el escándalo.