Las matemáticas son exactas y creo que esto ya está cantado: Duque será el nuevo presidente de Colombia porque para que gane Petro deben votar por él la totalidad de personas que lo hicieron por Fajardo y De la Calle, y eso no va a pasar a menos de que logre convocar una masa cercana al diez por ciento del total de los colombianos que nunca vota.
Petro debe convocar a aquellos que están convencidos de que el problema del país es de todos menos de ellos, que la política no es lo de ellos porque no viven de ella, que no van a estar en casa, que no saben dónde votan, que para qué votar si al otro día hay que trabajar, que para qué eso si todos son unos ladrones, en fin, centenares de excusas que siempre logran dejar en el ambiente el sinsabor de que los males del país no radican en quienes nos gobiernan mal, sino en quienes eligen mal porque los que pueden elegir bien no votan, una tarea verdaderamente titánica.
No obstante, y pese a una rara forma de seducir que están utilizando los petristas para atraer a los seguidores de Fajardo y De la Calle, que consiste en ofender, vilipendiar y humillar para luego rogar que lleguen allá, creo que hay un factor que cobra mucha importancia, aunque jurídicamente no cause ningún efecto y es el voto en blanco.
El blanco representa esa masa de personas, dentro de las que se encuentran personajes de la talla de Fajardo, Robledo y De la Calle, que no están de acuerdo con las tesis de los dos candidatos pero que a la hora de sumar reflejan el inconformismo con el sistema. Que aborrecen a los partidos tradicionales, pero que tampoco ven en Petro el ideal para gobernar. Que creen que si existe esperanza, pero que no es con los finalistas de este reality. Que no cuentan a la hora de votar, pero que sí suman al momento de sacar conclusiones.
Si la suma de quienes votan por Petro y de quienes votan en blanco llega a ser superior al 50%, es claro el mensaje que el pueblo le deja a sus gobernantes: no nos gusta la forma como nos vienen gobernando.
Así pues que si quienes leen esta columna creen que votar en blanco no tiene ningún significado, deben replantear la tesis porque es claro que lo que se busca es dejar un mensaje que en el gobierno central deben entender como “cambian o los cambiamos”.
