La inesperada muerte de José de los Santos Sauna, el cabildo gobernador de los kogui, conmovió a la comunidad en la gran Sierra Nevada de Santa Marta, uno de los grupos indígenas que más cohesión cultural y presencia tienen en Colombia. Su partida en la Clínica El Prado en Santa Marta, víctima del coronavirus, llevó a uno de los líderes indígenas a decir los siguiente en un trino:
"Hace algunas noches que tembló en la Sierra, los Mayores dijeron que la Madre estaba pidiendo a alguien grande. Y sí, llamó al más grande dirigente del pueblo Kogui. Su Cabildo Gobernador. Tiembla en la Sierra y llora el corazón del mundo. @ONIC_Colombia @ctcsierranevada"
Los indígenas de la Sierra, quienes además mantienen relaciones directa con las instituciones locales y nacionales, muchas de estas en cabeza precisamente de José de los Santos Sauna, lograron que su gobernador no fuera cremado y que les permitieran ser despedidos con sus rituales ancestrales: son nueve días de velación en el centro de su territorio, en la mágica Sierra de donde vienen y a donde regresan.
Para los kogui, la Sierra Nevada de Santa Marta es el corazón de la madre tierra. Un espacio en el que ellos y los otros tres pueblos indígenas han asumido la tarea de mantener el equilibrio entre todos los seres humanos y la naturaleza. Alrededor de los picos montañosos, hay más de 348 sitios sagrados o Nujwákala que son los canales de comunicación para los mamos, la máxima autoridad indígena, entre el mundo material y el espiritual.
South Pole, desde el Programa Conexión Jaguar, se une a las condolencias por el fallecimiento del Cabildo Gobernador Kogui José de los Santos Sauna, gran líder que hizo posible el trabajo conjunto para la protección de los bosques de la Sierra Nevada de Santa Marta. pic.twitter.com/VYz9BmDsN2
— South Pole (@southpoleglobal) August 7, 2020
El cabildo gobernador José de los Santos había entendido la importancia de este corazón de la tierra y durante su rol como gobernador se encargó de dialogar y disuadir a los grandes poderes económicos, turísticos y mineros para que no entaran a consumir la Sierra Nevada de Santa Marta. Era una suerte de canciller, quien mantenía contacto con distintas figuras políticas e invitados no indígenas para llevar el mensaje del respeto por la naturaleza y los pueblos indígenas. Para los kogui, con esta labor que desarrolló en vida, merecía un gran homenaje, un último adiós como establecen sus tradiciones.
El cuerpo de José de los Santos llegó en un helicóptero del Ejército a unos kilómetros de Pueblo Viejo, en la parte alta del río Garavito del municipio de Dibulla, La Guajira. Una vez el ataúd fue puesto en tierra, un grupo de seis kogui llevaron en sus hombros al cabildo gobernador para la mortuoria y siembra tradicional, que dura alrededor de 9 días en los que según la tradición Santos deberá atravesar nueve pueblos de la Sierra hasta llegar a Chundua, la zona sagrada de la Sierra y la montaña costera más alta del mundo. Por el momento los mamos y demás autoridades de la Sierra están definiendo cómo se hará este ritual ancestral bajo los riesgos de la pandemia.