Ese 26 de julio de 2011, cuando estaban velando al Joe Arroyo, mientras sus seguidores lo lloraban y hacían largas filas en la Catedral Metropolitana María Reina de Barranquilla para despedirlo, sus hijas y las mamás de ellas, y la última esposa del cantante, todas ellas de pie junto al ataúd, empezaron las discusiones por los bienes y por los derechos de la música del papá cantante.
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El Joe murió joven. Tenía 56 años y se le había escapado a la muerte una decena de veces. El vicio por el bazuco, las depresiones, los excesos con el alcohol, y los descuidos con su cuerpo que lo llevaron a sufrir hipertiroidismo, diabetes, afecciones pulmonares, fatigas musculares y complicaciones cardiacas y renales, que terminaron matándolo.
El Joe Arroyo tuvo en total siete hijos con cinco mujeres. Solo seis de ellos fueron reconocidos legalmente por el cantante. Con Adela Martelo duró casado solamente cuatro años, del 75 al 79 y con ella tuvo dos hijas Adela y Tania, esta última falleció muy joven, a sus 26 años a causa de una deficiencia pulmonar.
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A mediados de los años 80, cuando ya el Joe era un cantante que se escuchaba en las emisoras del país como un solista salsero de nivel con su orquesta La Verdad, el Joe se casó con Mary Luz Alonso, de quien dicen fue el gran amor de su vida. En el matrimonio de 21 años con Mary Luz, de quien se separó en 2001, el cantante tuvo también dos hijas, Eikol y Nayalibe.
Tras el rompimiento con Mary Luz Alonso, el Joe se volvió a encontrar con Gloria Godín, un viejo amor de juventud. La había conocido a sus 14 años. Con ella estuvo un par de años. y de esta relación nació Johana Paola. Dinkol Arroyo, el único hijo varón del Joe Arroyo nació en 1978, es hijo de Juana María, quien vendía guarapo en la ciudad de Cartagena.
La mujer con la que el Joe terminó sus días fue Jackeline Ramón. Con ella no tuvo hijos, pero el Joe adoptó un niño que Jackeline ya tenía cuando lo conoció, y quien dicen es hijo natural del cantante vallenato Diomedez Diaz. A Jackeline, por ser su última esposa, le correspondió el 50% de la fortuna del cantante. Y el otro 50 le correspondería en partes iguales a los 7 hijos reconocidos, pero ninguno ha recibido su lo que le corresponde.
Para proteger la herencia del Joe, un par de días después de su muerte sus hijas mujeres iniciaron el juicio de sucesión de los bienes, pero cuando se dieron cuenta gran parte de estos ya estaba, desde hace algún tiempo atrás en manos de su última esposa.
La pelea por la herencia tuvo primero dos bandos: Uno lo conformaron las seis hijas mujeres del Joe, liderado por Eikol y Nayalibe, las hijas que tuvo con Mary Luz Alonso, quienes llegaron a la unión bien armadas con los abogados del bufete de Abelardo De la Espriella. En la otra orilla estaba Jackelin Ramón, quien puso una barrera con su abogado Arcadio Martínez Pumarejo y quien además estuvo apoyada por el hijo varón del cantante, quien desde la muerte de su padre extrañamente dijo que renunciaba a la herencia económica del Joe. Su lealtad ha sido compensada por la viuda.
La demanda de sucesión se puso en el juzgado quinto de Barranquilla. Aunque el juez embargó las cuentas que pudo encontrar relacionadas con el Joe, el proceso está estancado. como Uno de los bienes más rentables del Joe es su legado musical, que está representado en las regalías por la obra del artista, herencia que quedó heredada en vida del Joe a la fundación JoeSon Music, de la que la representante legal y gerente es Jackeline Ramón, quien también en vida del cantante, logró proteger el legado que le dejó su fallecido esposo con un contrato con Sayco y Acinpro.
La unión entre hermanas solo duró un par de años. Con las demoras y otros enredos del proceso, el equipo que habían armado las hermanas empezó a fracturarse y se organizaron varios bandos, entre los que ha habido hasta amenazas de muerte entre ellas, así lo denunció Yohanna Arroyo en una entrevista para La Red de Caracol Televisión en 2020. Situación que ha beneficiado a Jackeline Ramón, quien ha sido la única que ha disfrutado la fortuna del Centurión de la noche, como también conocían a Joe.
Para complicar la situación, años después de la muerte del Joe se apareció una joven mujer y ante el juzgado reclamó parte de la herencia del cantante. Dijo que era otra hija de sonero y demandó el proceso por lo que también ha sido otra demora. Hoy en día cada grupo de hijas y mamá pelea la herencia que cree que le corresponde por su lado y con abogados diferentes. Son todas contra Jackeline Ramón, quién aprovecha todas las demoras y las peleas entres las mismas hijas para que el tiempo corra y como desde aquel 26 de julio de 2011, todo siga igual, pero sin el Joe Arroyo en vida.
