Las personas más vulnerables ante la COVID-19 son quienes están en la adultez mayor.
Aterrizar esta realidad a nuestras comunidades wayúu nos conlleva a asumir responsabilidades mayores, entre las cuales identificamos de mayor relevancia las siguientes:
1. A ellos debemos nuestro linaje y territorio.
A nuestras abuelas debemos nuestros eiruku (clan), base principal e identitaria de nuestra forma ancestral de organizarnos socialmente, lo cual identifica nuestra familia y arraigo territorial, lugar donde desarrollamos nuestra relación con la madre tierra, nuestra economía y la vida misma.
2. Son los principales transmisores de nuestros valores culturales:
Son la esencia de nuestro cuidado espiritual y la salud, así como también de impartir la armonía de nuestra familia y los demás eiruku con los que interactuamos. Valores culturales como el wayuunaiki (nuestro idioma materno), nuestras expresiones artísticas y artesanales, la pesca, el pastoreo y el cultivo, son resguardados en su sabiduría para ser replicados en las nuevas generaciones.
3. Debido a su edad son los más vulnerables ante la pandemia:
Las personas en avanzada edad van debilitando su sistema inmune, lo cual hace que la pandemia actúe con mayor fuerza en sus cuerpos, para lo cual debemos ser más cuidadosos en las recomendaciones del tapabocas, el lavado de manos y el aislamiento de personas desconocidas e incluso de las personas que salen de nuestras comunidades para garantizar el sustento diario.
La Guajira se protege cuidando responsablemente de nuestros abuelos y abuelas.