Cuando alguien te dice que si sabes nadar lo que te está diciendo es si tienes la experiencia en ello. No te está preguntando si crees que sabes nadar.
Con la realidad del ser humano suceden muchas circunstancias en las que tus creencias más elementales deberían estar apoyadas por el saber hacer, porque se ha aprendido a hacerlo. Cuando inviertes tiempo y dinero para obtener conocimientos que te preparen para desempeñar una labor se llama profesión.
En la calidad de la vida del ser humano no hay academias, institutos o universidades que te den una medida o preparación de cómo habrás de conducir tu vida. Nadie te va a decir que el ideal es disfrutarla integralmente. Comparto entonces estas ideas que si quieres llevar a la práctica son para iluminar tu conciencia, mas no tu mente.
Los ancestros de tus acciones son tus pensamientos. Tu metología de vida revela tu mentalidad, y lo llamas mi vida privada. Privada de principios y valores. La muestra de ello son los enredos emocionales, materiales y sexuales. Estos se identifican cuando, a base de creencias mas no de saber hacer, te mantienen en estados irritables, ansiosos o descontentos.
Cuando vives en la conciencia humana ordinaria, habrá algunos que te harán sufrir con comodidades porque envidias lo que otros tienen en vez de trabajarlos para obtenerlos. Cuando sabes la diferencia entre lo que sabes y lo que crees, tendrás oportunidad no solo de ser útil, sino feliz. Estás anclado en la realidad y la visión que tendrás de la vida será gozarla, no de desearla...