Si había una persona emberracada en Colombia este 21 de noviembre era el expresidente ALvaro Uribe. Ya sabemos que a él la alegría no le viene bien, la alegría del pueblo, él está es para hacer feliz a sus financiadores, Sarmiento Angulo y los Ardila. Él esperaba que la marcha estuviera llena de actos vandálicos, que destruyeran todo a su paso. Como un desesperado postiaba en su Facebook los pocos desmanes que hubo. Digo en su Facebook porque Twitter lo sancionó por andar como un enajenado poniendo cosas contra la marcha, muchas de ellas fake news por supuesto, algo que es su especialidad.
Día triste para Uribe y para sus seguidores más fanáticos. El pueblo salió a la calle en paz y fueron mas de dos millones en todo el país. En Medellín las imágenes hablan por su mismo
Pillen el video de @fcmonsalve En Medellín. Tremendo. Gracias por compartirlo. pic.twitter.com/5aA8iQ3J4w
— Pascual Gaviria (@rabodeajip) November 21, 2019
Y ni hablar de Bogotá
Si, pareciera que esta movilización, que estaba expresamente dirigida contra el gobierno Duque, marca el principio del fin del uribismo. Por eso se ve tan nervioso, tan desencajado en este video donde anunció que Twitter lo había sancionado
Además tiene encima la investigación por manipulación de testigos y a esto se le suma el haber perdido la alcaldía de Medellin y la gobernación de Antioquia, el lugar donde ha sido siempre fuerte. Viendo esa plaza de Bolivar llena y las arengas uno puede colegir que la gente se mamó de Uribe y lo más tenaz es que él lo sabe