El exsenador Mario Fernández, quien logró la curul con aval del partido liberal en el 2014 y con la que luego se quedó su esposa Ana María Castañeda, aspira a la gobernación de Sucre. Está de regreso a Sincelejo tras el portazo que le dio el Presidente Petro a donde llegó solo, sin apoyos políticos.
La situación crítica en que se encuentra llevó a buscar cobija en el Pacto Histórico para que éste le diera el aval, a pesar no haber tenido ninguna relación con el movimiento, distinto al de ser primo de Verónica Alcocer, quien tampoco ha tenido militancia alguna. Los primeros en reaccionar de forma negativa fueron los miembros del Polo Democrático de Sucre, como miembro del Pacto Histórico, quienes le enviaron una comunicación al presidente del partido, el senador Alexander López pidiéndole rechazar la posibilidad. En la misiva recuerdan el proceso penal que tiene abierto en la Fiscalía y por el que deberá responder el mes entrante y las investigaciones sobre presuntos vínculos con el paramilitarismo.
Mientras Fernández busca afanosas salidas políticas la Fiscalía ha continuado con las investigaciones en su contra por presuntos delitos falsedad de documento y fraude procesal y ya fue citado para la imputación de cargos el próximo 20 de agosto.
La imputación es producto de esta denuncia interpuesta a comienzos del 2018 cuando aún tenía la credencial de senador, producto de haber presuntamente aportado documentos falsos sobre sus estudios de bachillerato: