En Hidroituango como en la guerra la primer sacrificada es la verdad, pues las distintas versiones que se manejan del incidente que le costó la vida al funcionario de Empresas Públicas de Medellín, Guillermo de Jesús Pérez Restrepo, a Sergio Alejandro Toro López y Geiner Stiwar David Mira de Asocomunal de Sabanalarga, da a entender que se está manipulando la información. El accidente se presentó el 16 de marzo y EPM en un lacónico comunicado que tiene fecha 23, esto es, 7 días después de lo sucedido dio a conocer la noticia. La falta de transparencia de la entidad para informar que fue lo que realmente pasó, nos ha llevado a buscar por nuestra cuenta una información más cercana a la realidad de los hechos, pues no nos comimos el cuento de que los fallecidos habían caído al embalse o el simple accidente de la lancha en que navegaban.
En nuestra averiguación encontramos dos versiones que apuntan a determinar las causas de la tragedia. Esto es, que por la intensidad de las lluvias el río Cauca arrastra todo lo que se encuentra a su paso y que por lo tanto una empalizada les volcó la lancha, pero existe otra versión que de ser cierta resultaría muy preocupante porque apunta a indicar que la lancha se desplazaba cerca la “pata” de la montaña y que hubo un desprendimiento de tierra que los sepultó.
Ahora bien, los fallecidos no estaban de turistas sino trabajando y según los reglamentos, obligatoriamente tienen que utilizar chalecos salvavidas y si se hubiera tratado de un accidente normal es muy muy posible que salvaran la vida, pero si se trató de del desprendimiento de una masa de tierra de la montaña, ahí si no hay salvavidas que valga. La Fiscalía, por ejemplo, tendrá que trabajar sobre estas dos hipótesis para determinar las verdaderas causas del accidente, empezando por determinar si estaban trabajando los fallecidos en el embalse sin chalecos salvavidas violando las normas que se tienen establecidas, pues el uso del chaleco es obligatorio. La Fiscalía en su investigación tendrá que determinar también si los fallecidos estaban navegando cerca a la “pata” de la montaña y si se presentó un desprendimiento de tierra que los sepultó. Si esta hipótesis resulta cierta, el futuro del proyecto estaría amenazado y por eso el sospechoso silencio y la desinformación de EPM.