Los encargados de los tribunales judiciales en Banjul, capital de Gambia, tenían el mismo problema todos los días: una adolescente gordita que todos los días capaba clase para poder ver los juicios. Era Fatou Bensouda, una musulmana nacida en una familia polígama de clase media. En esos primeros encuentros con los jueces empezó a forjar su obsesión: ejercer la justicia desde los ojos de una mujer.
Bensouda es hoy la Fiscal General de la Corte Penal Internacional - CPI -, la instancia judicial más importante del mundo con sede en La Haya. Es la primera vez que un funcionario de la CPI viene oficialmente a Colombia y Fatou Bensouda tiene tres temas para investigar, pero uno tiene prioridad a la que le puso el ojo desde el 2004: supervisar las investigaciones contra 29 altos mandos de las Fuerzas Militares por casos de Falsos Positivos. También viene a revisar que la JEP cumpla con los requisitos del Estatuto de Roma para no permitir la impunidad, y para fortalecer los procesos jurídicos contra los feminicidios.
Cuando no está dentro de una sala penal, la fiscal usa los coloridos vestidos típicos de su pequeño país, Gambia, que tiene solo 1,8 millones de personas. Estudió Derecho en Nigeria, pero volvió a su país y después de ejercer unos años en el sector privado, ocupó los puestos públicos más importantes: secretaria jurídica de Dawda Jawara, el primer Presidente de la República de Gambia, para luego ser Fiscal General y Ministra de Justicia del dictador Yahya Jammehs, que tiene numerosos escándalos de violaciones de Derechos Humanos.
Juan Pablo Rodríguez Barragán, actual Comandante de las Fuerzas Militares, es el primero en la lista de investigaciones de la Fiscal Bensouda. Varias organizaciones, entre ellas Human Rights Watch, han denunciado cómo las cabezas de las tres ramas militares en Colombia fueron condescendientes con los Falsos Positivos. El General Rodríguez dirigía la Cuarta Brigada en Antioquia, y durante su tiempo allá se comprobaron 28 casos de falsos positivos.
Son 23 generales y seis coroneles los que tiene apuntados Bensouda. Las denuncias contra estos nombres suman 1,228 casos de asesinatos extrajudiciales de un total de más de 3,000 que se han cometido en este siglo. La mayoría de nombres están ahí no por evitar
Juan Manuel Santos, el jefe directo del comandante Juan Pablo Rodríguez y los otros 28 militares, recibió este lunes a la fiscal Bensouda en el Palacio de Nariño junto a su gabinete. Estuvieron presentes el vicepresidente Óscar Naranjo, la canciller María Ángela Holguín, el ministro de Justicia Enrique Gil Botero así como el exministro de esa cartera, Yesid Reyes. En esta reunión el tema fue la JEP, que incluye los crìmenes de lesa humanidad de las FARC así como la financiación de grupos paramilitares.
El segundo nombre que aparece en la lista que trae Bensouda, por orden de jerarquía en la escala militar, es el de Jaime Lasprilla, excomandante de las Fuerzas Armadas, quien relevó a Juan Pablo Rodríguez. Durante su paso por la Novena Brigada tuvo dos problemas. Campesinos del Huila y Caquetá acudieron a los tribunales para denunciar en su contra 54 casos de falsos positivos que dejaron 104 víctimas. Pero el otro problema que tuvo fue que cuando el comando Fudra, una de las fuerzas de tarea especial, hizo una operación en el Meta. Días después un soldado habló en los micrófonos de la FM: habían encontrado el computador de Romaña, pero este nunca quedó registrado. El General Lasprilla salió a defender a sus tropas: “Estaban haciendo Patria, por favor respeten el debido proceso de investigación.” El computador nunca apareció.
La efectividad de la Corte Penal Internacional es un tema de debate. Por un lado están los que dicen que sirve para poco. De las veintidós investigaciones que ha abierto, solo hay tres condenas: Thomas Lubanga, líder de las milicias de la Unión de Patriotas Congoleños, condenado en julio de 2012 a catorce años de cárcel; Germain Katanga, líder de otro importante grupo de milicianos del Congo, condenado en mayo de 2014 a doce años de prisión por crímenes de asesinato, esclavitud sexual y empleo de niños soldado; y Jean Pierre Bemba, vicepresidente de la República Independiente del Congo, quien permitió que las tropas a su mando violaran niñas y niños como estrategia de guerra.
Uno de los casos más polémicos es el Omar Hassan Al Bashir, presidente de Sudán. Cuando se anunció que entraba en investigación, la comunidad internacional se emocionó. Lo acusaban de genocidio y crímenes de guerra, pero su caso quedó absuelto. La razón, como ha pasado en la mayoría de los casos, es que la corte depende mucho de la colaboración con los estamentos de las naciones donde se cometieron los crímenes, por lo que muchas veces los gobiernos deciden no cooperar, y la CPI queda con las manos atadas. Si emiten una orden de arresto y el país donde se encuentra el acusado no lo captura, solo queda esperar que el investigado se entregue voluntariamente.
El otro gran problema es que los juicios no se cierran si el acusado no está presente en la sala. Por esto mismo Kony, quien en el 2012 fuera reconocido por la campaña que pedía su captura, no ha sido encontrado culpable por la CPI. Tiene una orden de arresto, pero no está condenado, a pesar de las pruebas sobre las torturas más atroces que ha cometido.
Por ahora el área de la corte es África. Sus investigaciones, exitosas o no, han sido contra los dictadores africanos o miembros de grupos alzados en armas de esos mismos países. En la agenda oficial de la Corte Penal Internacional solo aparecen audiencias contra nombres de ese continente. Por ahora este viaje a era Colombia solo para conocer de primera mano las acusaciones y los argumentos de defensa de los mandos militares mencionados.
5 casos principales.
1. Primera División y la décima Brigada: 146 falsos positivos que se efectuaron cuando estaban al mando el coronel (r) Néstor Raúl Espitia Ribero (2004); coronel (r) Hernán Giraldo Restrepo (2004-2006), coronel (r) Fabricio Cabrera Ortiz (2006-2007), general (r) Leonel Gómez Estrada (2001-2003) y el general (r) Mario Montoya Uribe, quien estuvo en la costa caribe hasta el 2006, y que luego pasó a ser comandante de las Fuerzas Militares hasta el 2008, de donde salió porque estalló el escándalo de los Falsos Positivos.
2. Segunda División del Ejército, 208 casos para investigar e implica al general (r) Carlos Ovidio Saavedra (2004-2007) general (r) José Joaquín Cortés (2007-2008), coronel (r) Santiago Herrera Fajardo, coronel (r) Rubén Darío Castro Gómez (los dos fueron dados de baja por los falsos positivos), general (r) Paulino Colorado (2006-2008) y el general (r) Ricardo Bernal Mendiola. El caso de las Madres de Soacha, donde 11 jóvenes fueron llevados desde Cundinamarca para ser presentados como bajas guerrilleras en Ocaña está dentro de este caso.
3. Cuarta División tiene imputados 224 casos e involucra al general Guillermo Quiñonez (2005-2007), general Henry Torres Escalante (2005-2007), coronel Cipriano Peña Chivatá, general Néstor Rogelio Róbinson Vallejo.
4. Quinta División y Novena Brigada, en la que se investigan 119 asesinatos, en la que aparece el nombre del general Lasprilla, general William Pérez Laiseca (2007-2008), general (r) Gustavo Matamoros y el general Jairo Erazo Manzola.
5. Séptima División, incluyendo las brigadas IV, XI y XIV que operaban en Antioquia y Córdoba, y tiene acusaciones por 677 casos. Aparecen los nombres del general (r) Óscar González Peña (2005-2006) general (r) Luis Roberto Pico Hernández, vuelve a aparecer el nombre del general (r) Mario Montoya