Yo conozco a pretenciosos que se creen expertos de cine afirmar que Leonardo di Caprio es un pésimo actor. Son los bobitos que se creen muy sabios porque hablan de cine arte y odian todo lo que sepa a Hollywood. Son tan ignorantes que no saben que el gran cine es una invención de Hollywood, los aguerridos independientes que, en plena guerra de patentes, se fueron a la soleada California para darle vida a los mitos: Buster Keaton, Chaplin, Harold Lloyd y toda la santa lista. Las estrellas de cine son norteamericanas, o al menos nacieron en California. Cuando el concepto de actor de carácter se fue agotando con Jimmy Stewart, Cary Grant o Rita Hayworth, surgió el actor Studio, Lee Strasberg y toda la técnica de Stanislawsky. Entonces nacieron monstruos como Jack Nicholson, Marlon Brando, James Dean. Había que encarnar el personaje, vivirlo. La actuación como algo que duele, que se siente por dentro. Leo Di Caprio es hijo directo de Strasberg y, por eso, antes de ser Jack Dawson había sido Gilbert Grape y todos creíamos que Leo tenía un problema de aprendizaje porque su interpretación fue realmente perfecta.
Pero de un plumazo los que se creen críticos de cine quieren borrar además interpretaciones tan desgarradoras como la de Leo en Los infiltrados, El lobo de Wall Street y es tan profunda su ignorancia que ni siquiera saben que Di Caprio es el reemplazo natural de Robert De Niro –les suena- en la filmografía de Martin Scorsese.
Lo mismo está pasando con Robert Pattison. Los millenials que se criaron en la primera década de este siglo se enamoraron con la pareja entre Edward Cullen y Bella Swan. Pero desde el 2012, cuando Pattison se saca de encima el personaje de Cullen, se disparó como un actor de prestigio. Primero fue David Cronemberg con su monumental Cosmopolis. Entonces vino The lost of city Z, y las asombrosamente oscuras El Faro y, sobre todo, El diablo a toda hora con un poderoso Tom Holland.
A sus 35 años ha cambiado de piel y se va a encargar de meterle la estaca y decapitar al vampiro. Tendremos un nuevo Pattison que sorprenderá en Batman, a pesar de las críticas estúpidas que recibe de los atrevidos que no saben de lo que hablan pero que lo hacen con autoridad.