Los diferentes equipos de ciclismo profesional participantes en las competencias internacionales relevantes, como lo es el Tour de Francia, aplican una estrategia de conjunto e individual con el fin de ser competitivos y salir avante ante sus pares. Esa es la denominada estrategia motriz del ciclismo en ruta.
En el ciclismo como en las organizaciones empresariales se requiere de una excelente coordinación, solidaridad y cooperación mediante una comunicación asertiva en todas las direcciones y en todos los niveles. El principio de incertidumbre está presente en la línea de partida de cada una de las etapas de un circuito de competencia: las amenazas por factores climáticos, las condiciones de la ruta y el comportamiento de los rivales están a la orden del día. Sin embargo, las fortalezas de los compañeros de equipo y su rol en determinados momentos de la carrera serán fundamentales para alcanzar los objetivos trazados.
En un equipo de ciclismo profesional se deben tener en cuenta y conocer varios aspectos: reglamento, técnica de ejecución, tiempo, espacio y comunicación.
En el campo empresarial se deben tener en cuenta: las normas externas e internas, las técnicas y habilidades de operación, la eficacia y eficiencia productiva, el segmento o espacio de mercado objetivo y la articulación coordinada por los diferentes canales de comunicación.
En algunos momentos de una etapa en un circuito de ruta, debido a las circunstancias, los ciclistas cumplen roles variados como gregario, líder, opositor, colaborador, solidario… Se adaptan a la situación del momento en pos de sus intereses personales o del equipo. Este es el concepto de estrategia motriz, que permite identificar qué acción y quién la debe realizar en determinado espacio y tiempo, sin infringir el reglamento previamente coordinado por una adecuada comunicación.
Una alianza, un joint venture o un proyecto conjunto, en cualquier ámbito, son necesarios y ayudan a potencializar las fortalezas individuales de los aliados… aliados en una guerra… aliados en un emprendimiento… aliados en los negocios… aliados en el deporte... aliados en conocimientos… aliados estratégicos.
La alta gerencia debe estar en la capacidad de identificar cuál, en qué momento y en cabeza de quién está la fuerza motriz de un equipo, suministrarle los recursos, la orientación y el acompañamiento que requiera para impulsar toda la organización hacia la meta anhelada.
Así mismo, la dirección estratégica, mediante el constante monitoreo, análisis y la toma de decisiones adecuadas, debe rotar el liderazgo de la fuerza motriz según corresponda a las situaciones que se presenten en las variaciones de espacio y tiempo.
Una sola fuerza motriz no es infinita e inagotable, una sola golondrina no hace el verano.