Durante las últimas semanas el país ha sido testigo de los movimientos que se han dado en los partidos políticos con miras a las elecciones de este año; algunos tienen aún por definir sus candidatos y otros ya están mirando las posibles alianzas para derrotar al presidente candidato en una segunda vuelta. Esta última no se descarta del todo, pues poco a poco se le escapan los votos de la Unidad Nacional que él mismo ha liderado durante su mandato.
Ahora hablemos de cómo están los partidos y los posibles escenarios que se darían en los meses que faltan para las elecciones presidenciales:
La Alianza Verde seguramente con Enrique Peñalosa a la cabeza buscará estar en una segunda vuelta electoral, pero no descarto una división en ese partido, pues sus ideales políticos entre algunos de sus líderes siguen siendo poco coherentes cuando hablamos de su apoyo uribismo o al santismo, teniendo en cuenta que si apoyan a uno de los dos su balanza se inclinaría a formar una alianza con otra colectividad y terminarían por nombrar un candidato único.
El Polo Democrático parece ya tener listas las cartas sobre la mesa con las que aspiran llevar a la presidencia a Clara López, ahí ya todo está definido. Siguen siendo un partido de oposición y no harán alianzas con otros.
La UP con Aída Abella poco a poco busca reponerse y dejar a un lado su pasado, no serán muchos los votos que recibirán en la contienda electoral, pero sí tiene un discurso con apuntes interesantes al que muchos no le prestan atención por estar tras los pesos pesados de los principales partidos.
Por otro lado los de la U respaldan de manera contundente la reelección del presidente Juan Manuel Santos, y su convención fue todo un jolgorio donde casi nadie quedó descontento, los únicos fueron los responsables de los 12 votos en contra a su aspiración de permanecer durante otros cuatro años en la Casa de Nariño.
De otro lado los Liberales y Cambio Radical siguen muy alineados con las iniciativas que proponen en la Unidad Nacional, tampoco tienen un líder fuerte y es por eso que descarto que se vayan a alejar para hacer oposición.
Ahora bien, el Partido Conservador que tiene tres ministros dentro del actual gabinete ministerial, 22 Senadores y 36 representantes a la Cámara decidió hacerse a un lado y oponerse a la reelección del presidente Santos en una acalorada convención donde fueron más los descontentos que los contentos a la hora de tomar esa decisión, y elegir a Marta Lucía Ramírez como la candidata única de esa colectividad. Tal es el descontento que impugnaron la convención y están pidiendo que los ministros renuncien… Esta tormenta política en lo único que va a terminar es dividiendo más un partido que durante los últimos años se ha venido resquebrajando.
¿Y qué decir del Centro Democrático con Óscar Iván Zuluaga?... un candidato que ni suena ni truena, un desconocido para muchos que siempre es la sombra del ex presidente Álvaro Uribe y que no ha “mostrado garra” a la hora de hacer campaña y dudo mucho que lo haga en los debates políticos que están por venir.
Así las cosas creo que el Centro Democrático y el Partido Conservador ya hablaron de un posible escenario de coalición entre ambos partidos apoyando a Marta Lucía Ramírez para que en una segunda vuelta sea una fuerte contendora para el presidente Santos; ese huevito se está cuajando desde la reunión que se dio en días pasados entre los ex presidentes Uribe y Pastrana, quienes tienen el voto de opinión más importante en cada partido. Y es que recordemos que Marta Lucía Ramírez fue para Álvaro Uribe una excelente ministra cuando estuvo al frente de la cartera de Defensa y cinco años atrás cuando aún era presidente, Uribe se refirió a ella diciendo: “es muy organizada… y si la mano mía es firme, al lado de ella es de azúcar”.
En definitiva, el Partido Conservador y el Centro Democrático han mostrado cierta afinidad, no solo por los colores de sus logotipos, los antecedentes con la elección y reelección de Álvaro Uribe, sino también al oponerse a la Unidad Nacional que lidera el Presidente Santos. Y, si miramos el potencial electoral que puedan tener sus dos candidatos, entre Marta Lucía Ramírez y Óscar Iván Zuluaga, ella es un peso pesado que puede ser la piedra en el zapato para el presidente candidato. Todo esto me lleva a pensar que la estrategia que se está armando aquí es la de un cajón, para guardar en el olvido la pobre campaña de Zuluaga.