Cuando recién habían terminado de pasar los meses más duros de la pandemia, Sigifredo Díaz, empresario nacido en Armenia, Quindío, le dio vida a un proyecto que bautizó Avocados del Quindío. Su idea era tener una empresa dedicada a la comercialización de aguacate, cuyos productos fueran 100 % naturales y amigables con el ambiente, gracias a una planta de tratamiento de agua y a los paneles solares.
Con su empresa, Sigifredo Díaz también quería impactar positivamente en la comunidad, asunto que le ha preocupado desde el terremoto que azotó a su ciudad en 1999.
Avocados del Quindío creció rápidamente y se convirtió en referente por sus productos innovadores, pues no se enfocaron solo en distribuir el aguacate cosechado como fruta, sino que decidieron fabricar productos cosméticos y medicinales a los que llamaron Hey Chef.
En 2022, apoyados por la Gobernación del Quindío, abrieron una planta de transformación de aguacate hass en Calarcá. Comenzaron vendiendo aceites de aguacate en el resto del Eje Cafetero, luego pasaron a comercializarlos en Bogotá, otras ciudades principales y lograron una alianza con Almacenes Éxito.
Ese rápido crecimiento como espuma se vio reflejado en el último mes tras la exportación de 300 cajas de su Hey Chef al este de Europa, específicamente a Rumania, para lo cual contaron con el apoyo clave de Bosanet y Procolombia. Ya están cuadrando un segundo envío para Rumania y también está entre sus planes llevar sus productos a base de aguacate hacia Estados Unidos, Canadá, Francia y varios países de Suramérica.
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