El alcalde Dionisio Vélez no piensa impedir que los caballos con los coches de turistas sigan recorriendo las calles de Cartagena. Se resiste a obedecer la órden que dio el Procurador Ordóñez de retirar los coches del Centro Histórico. El procurador delegado para asuntos ambientales y agrarios, Óscar Darío Amaya, le envió una carta a Vélez en la que expresa su preocupación por casos de maltrato animal que van en contravía a la Ley 84 de Protección Animal vigente en Colombia desde 1989. Los caballos a plena luz del día se han desplomado de cansancio debido a los casi 100 kilómetros que deben recorrer durante las jornadas de trabajo en las que los mantienen los cocheros; la falta de hidratación y la mala alimentación que padecen, se mezcla con tener que transportar a los turistas bajo el sol Caribe a temperaturas de más de 30° centígrados.
Funcionarios de la Procuraduría Delegada realizaron una visita de seguimiento en la que encontraron que las pesebreras de Chambacú donde los mantienen están en pésimas condiciones de salubridad; abunda la basura que atrae moscas y roedores, y los caballos no cuentan con agua fresca ni con alimentación adecuada.
Este es el documento que la Procuraduría le envió al alcalde Vélez: