El pasado 8 de mayo, la Federación de Estudiantes de la Universidad de Costa Rica, FEUCR, invitó a Rafael Correa a dictar una conferencia llamada ‘Logros de la revolución Ciudadana en Ecuador’. Algunos partidos y colectivos habían programado una protesta pacífica a las afueras de la Facultad de Derecho por las posiciones contrarias a los derechos de las mujeres y la población LGTBI, por su política extractivista y por su negligencia en la investigación por la desaparición de nuestra camarada Carolina Garzón.
Activistas por los derechos de las mujeres y la población LGTBI y militantes del Partido del Trabajo, del Partido Revolucionario de las y los Trabajadores y del Nuevo Partido Socialista realizaron su protesta, mientras el compañero Carlos Andrés Pérez del PRT, al interior del auditorio levantó un cartel con la imagen de Carolina Garzón, respetando las reglas de juego de la FEUCR que no permitía espacios para cuestionamientos ni preguntas. El compañero fue agredido por la escolta de Rafael Correa y expulsado de manera violenta del recinto.
¿Cuál fue la molestia de Correa? El reclamo por las desaparición de Carolina Garzón.
Por eso el Gobierno de Correa no pudo reconocer que se ha visto obligado a ofrecer una recompensa, que antes del caso de Carolina Garzón no había ninguna preocupación por la desaparición forzada que es pan de cada día en Ecuador, sino que se refirió de manera despectiva al tema. Desde el twitter de la Presidencia de Ecuador, @Presidencia_Ec, manifestaron: “@MashiRafael critica que grupos desubicados en Costa Rica quieren utilizar desaparición de Carolina Garzón para involucrar al gobierno”.
En su programa Enlace Ciudadano, dos días después, señaló: “La desaparición de Carolina Garzón fue una tragedia que ocurrió hace dos años en Quito. Desapareció la joven colombiana que se dedicaba a hacer pulseras, vivía con un grupo de amigos. Es una desaparición que estamos investigando. Les dimos todo el apoyo a sus familiares para que vengan a Ecuador. En principio no tiene nada que ver la fuerza pública, recién me entero que es integrante de un partido político”. Esto lo dice a pesar de que el mismo Correa se ha reunido con miembros del Partido Socialista de los Trabajadores en Bogotá y en Quito.
Carolina Garzón, militante del Partido Socialista de los Trabajadores y de la Mesa Amplia Nacional Estudiantil, MANE, llegó a Ecuador como turista, sus familiares y copartidarios nunca han atribuido su desaparición a agentes estatales, pero sí han señalado la desidia de los organismos de investigación en Colombia y Ecuador y han levantado un movimiento por su aparición. Eso le molesta a Correa, que Carolina no es una desaparecida más, que dos años después su nombre lo sigue persiguiendo, exigiendo justicia.