A los 26 años Camila Zárate tenía todo aquello con lo que sueñan muchos jóvenes a esa edad; fama, belleza y una prometedora carrera en el mundo de la farándula colombiana. Sin embargo, ella no se sentía plena. Muy por el contrario, sentía que el público la rotulaba con una serie de etiquetas que la incomodaban. Ella, que acababa de terminar la telenovela Dulce Amor, de Caracol, sentía que tenía una depresión la cual la obligaba a darle un giro radical a su vida. Fue así como terminó aburriéndose de las cámaras, de estar siempre arreglada y hasta llegó a aburrirse de su oficio como actriz.
Fue así como siguió sus instintos; agarró un avión hacia México y en el país azteca descubrió nuevas facetas de su persona. Se interesó por la artesanía, vendió pulseras en las calles e hizo malabares en semáforos. Ella atribuye el cambio a la necesidad que sintió por descubrir quién era realmente como persona, más allá de su faceta como actriz y presentadora. Actualmente se encuentra reconciliada consigo misma. Hace mucho ejercicio y cuida con rigurosidad su alimentación. No la motiva la vanidad sino la salud y el bienestar pues tiene la firme convicción que uno es lo que come. De igual manera, usa muy poco maquillaje y solo lo usa en ocasiones especiales como una entrevista que dio al programa La Red, de Caracol, la cual fue suficiente para despertar el interés del público que todavía la recuerda y ponerla nuevamente en coyuntura.
En medio de la pandemia por el COVID-19, la actriz ganó recordación por cuenta de la repetición de dos de sus telenovelas más recordadas. La primera, Chepe Fortuna, por RCN. Ahí interpretó a la hermana ambiciosa del protagonista. Sin embargo, para esa telenovela los productores inicialmente le habían ofrecido el papel protagónico. Ella lo rechazó pues no se sentía preparada actoralmente para afrontar ese reto. Fue así como Taliana Vargas terminaría dando vida a Niña Cabrales. La segunda telenovela en la que por estos días los colombianos ven a Camila Zárate de vuelta en tv es la bionovela de Rafael Orozco que Caracol repite en horario prime time.
No obstante, en los últimos años su retiro de la actuación no ha sido total. En 2016 regresó al país para grabar Las Vegas. Estuvo en dicha producción junto a actores como Natalia Ramírez, Santiago Alarcón, Greeicy Rendón y Juan Alfonso Baptista. En la novela daba vida a Antonia, personaje que le resultaba una parodia de sí misma pues tenía que representar a una hippie no muy distante de lo que es ella por fuera de las cámaras. Ese mismo año también tuvo una participación en La Ley del Corazón, novela también de RCN. En 2019 se estrenó en el cine en la adaptación cinematográfica de la novela El olvido que seremos, del escritor Héctor Abad Faciolince.
Con tan solo 33 años Camila Zárate tiene un amplio camino recorrido. Fueron más de diez años los que estuvo entre la radio y la televisión. Ha sido presentadora, actriz y locutora. La carrera como actriz que empezó siendo tan solo una niña en la escuela de Maria Angélica Mallarino, no se la quita nadie. En Instagram, aunque no es muy activa y puso su cuenta privada, tiene más de 60mil seguidores, mientras que en Twitter, donde comparte pensamientos ocasionales, supera los 100mil. La bogotana sabe que las puertas de la televisión colombiana están abiertas para cuando quiera volver. Su público todavía la recuerda.