Un grupo religioso con sede en Corea del Sur llamado la Iglesia de Jesús Shincheonji dijo que más de 4.000 miembros de la iglesia recuperados de COVID-19 están dispuestos a donar plasma para desarrollar una terapia denominada "plasma convaleciente", que ha demostrado su eficacia en la reducción de las tasas de mortalidad para los pacientes que luchan contra el virus. Esta escala sin precedentes de donantes de plasma de una región de Corea del Sur tiene la esperanza de ayudar a los esfuerzos mundiales para combatir rápidamente la devastadora pandemia.
Si los 4.000 pacientes donan 500 ml individualmente, la cantidad de sangre donada tendría un valor de aproximadamente 83.000 millones de dólares, de acuerdo con la transacción actual en los Estados Unidos. “Es difícil acelerar el desarrollo de un medicamento para COVID-19 con solo 200 pacientes recuperados que expresaron su voluntad de donar su sangre. La donación masiva de los pacientes recuperados en la Iglesia Shincheonji resolverá el problema de la falta de sangre para la investigación", dijo un funcionario de Green Cross Pharma, que es una compañía biofarmacéutica en Corea del Sur.
El Sr. Man Hee Lee, el fundador de la Iglesia Shincheonji, dijo que se aconseja a los miembros de la iglesia que donen su plasma voluntariamente. "Jesús se sacrificó con su sangre por la vida, esperamos que la sangre de las personas pueda traer efectos positivos para superar la situación actual", comentó.
Así mismo, un funcionario de la iglesia señaló: “Hablamos con las autoridades de salud e intentamos establecer un plan con detalles para la donación. Algunos de los miembros recuperados ya han donado individualmente, agradecidos por la ayuda del gobierno y los equipos médicos. Expresaron su voluntad de contribuir a la sociedad".
Cabe anotar que durante el primer trimestre de este año, la rápida propagación del virus golpeó a los miembros de la iglesia en Daegu de Corea del Sur, donde aparecieron las primeras señales de la crisis con la controversia sobre los visitantes masivos de China antes de la infección de los miembros de la iglesia.