En la mayor parte de la América Prehispánica sus habitantes, especialmente quienes vivían en las montañas Andinas utilizaban su "hoja sagrada" ya sea masticándola o haciendo té.
Estos antepasados y sus actuales descendientes la utilizaron y utilizan para combatir la sed, el soroche o mal de alturas, el cansancio de las largas jornadas y mitiga el hambre, sin que se halle ningún tipo de daño en la salud humana para quienes la utilizan.
Los colonizadores españoles encontraron en esas tierras colosales civilizaciones con estructuras sociales muy avanzadas que incluso hoy nos deslumbran sus descubrimientos.
Pero entonces se comienza a utilizar la coca no como mata sagrada, sino como estimulante que es una de las muchas propiedades haciendo énfasis cuando en 1903 se utiliza en un refresco llamado Coca Cola, en Europa el famoso Sigmund Freud ya asociado con otros científicos centraron sus estudios en uno de las propiedades de la hoja de coca y pasó de ser un estimulante tan inofensivo como lo es el café, a convertirse en un poderoso y aditivo, tanto que él mismo famoso científico terminó sus días adicto.
Pero lo que acá proponemos es que hoy Colombia que por cuenta del narcotráfico local e internacional es el mayor productor de hoja la que según expertos se usa hace más de 8.000 años en estas tierras sea utilizada enfatizando todas sus excelentes propiedades naturales y que estamos seguros servirían para aliviar muchas de las penurias del mundo civilizado.
En 1961 la hoja de coca se incluyó en La Convención Única sobre estupefacientes de las Naciones Unidas, por lo tanto, está sujeta a control y esto ocurrió porque para entonces los siempre blandengues y avasallados gobiernos de los países productores no dieron la batalla por defender un cultivo tan ancestral como el maíz, la quinua o el tabaco; pero que como país tercermundista tiene que someterse a las potencias que le imponen su modo de vida.
Por lo tanto, una planta ancestral que por miles de años sirvió a tantas generaciones y que se le quiere quitar el arraigo cultural que sobradamente lo tiene solamente defendido únicamente por Bolivia País que, en cabeza de Evo Morales, solicitó en una carta al señor Ban Ki Moon entonces secretario de la ONU que se suspendieran los párrafos 2C y 2E de esa convención "donde se prohíbe la masticación de la hoja de coca" estas objeciones fueron apoyadas por 167 países y solo 17 han venido torpedeando la justa reclamación.
Por todo lo anterior, la erradicación forzosa ha traído fuertes choques entre la población y sus autoridades;
Pero detengámonos en la idea principal de este escrito y es dar a conocer las propiedades de la hoja de coca:
Contiene cantidad de vitaminas, como son la vitaminas A,B1, B2,B5,B9 ( ácido fólico) B16, C y E. Además nos aporta sin número de antioxidantes y flavonoides que disminuyen el riesgo de enfermedades.
Debemos exaltar también que cada hojita contiene grandes cantidades de zinc, cobre, hierro, calcio, magnesio, potasio, sodio, fósforo y manganeso.
Semejante poder no puede ser desperdiciado por el mal uso que comerciantes le han dado a la hoja de coca y seguir empecinados en el error histórico que se le ha querido dar, por lo tanto, el Gobierno nacional está demorado en transformar esas 200.000 hectáreas en dinero bueno y crear en el INVIMA o donde corresponda un instituto parecido a los que tiene la Federacion Nacional de Cafeteros y comercializar todos los buenos derivados de la planta sagrada.
Y recomendar los productos derivados para prevenir desde enfermedades cardiovasculares, vértigos, caries, cáncer de colon, evita la obesidad, las afecciones respiratorias tan comunes hoy en día sin olvidar que ayuda a combatir la depresión, regula la producción de estanina, regula la oxigenación cerebral, mejora el metabolismo, protege la flora intestinal, elimina las toxinas de la sangre aliviando la función del hígado.
En 1975 la Universidad de Harvard que la harina de coca es un complemento necesario pues su valor nutricional es muy alto y no provoca ningún tipo dé adicción.
Por todo lo narrado, descrito y comprobado no tenemos una planta maldita, por el contrario el Gobierno de Colombia tiene en sus manos un commodity más valioso que el mismo petróleo y lo tiene servido y sus cultivadores sin saberlo pueden ser los nuevos ricos de manera honrada.
Si el mundo torpemente utiliza la planta de marihuana para "usos recreativos" con ganancias fuera de lo común déjenos la estigmatiza con de la hoja de coca y deslegitímenos el su cultivo de una planta y enderecemos el camino que los antiguos nos dejaron como regalo.
Con el nuevo y acertado enfoque que el presidente Petro le está dando a la lucha antidrogas, lo que ha valido un reconocimiento de los senadores y funcionarios del Gobierno norteamericano que nos visitan por estos días sobre los "errores cometidos" en esa materia, tenemos la certeza que al igual que el canabis la coca será reivindicada y su uso medicinal será exaltado para bien de la Colombia Humana.