Nuevamente los trabajadores deberán pagar los platos rotos de privilegios tributarios del pasado y de los causados por la pandemia. Las principales afectaciones, según el analista Salomón Kalmanovitz, serían las siguientes:
- Funcionarios que ganen más de 25 millones deberán hacer un aporte al impuesto a la renta de $35.000 mensuales.
- Elevación de tarifas y una sola exención del 35% sobre los ingresos de la clase media.
- Gravar "megapensiones" mayores a $7.000.000.
- Aplicar IVA al azúcar, café y chocolate, medicina prepagada y créditos de vivienda (19%); concentrados, y fármacos, que aumentarán el costo del pollo y el cerdo (14%, 17 % respectivamente). Y lo más grave, como señala el profesor, será "enmiserar" a los funcionarios públicos, quienes verán congelados sus salarios por cinco años o la pérdida del 15% de su valor.
Este anuncio que ya venía haciendo desde hace rato el expresidente Uribe y que corresponde a la animadversión y desprecio que le tiene a la clase trabajadora y de la que ha hecho gala desde que ha sido presidente.
Todos estos ingresos que significarán mayores sacrificios de los más débiles se harán para favorecer a programas de asistencialismo social que no fortalecen la empresa ni la innovación, pero que en la práctica significan la continuidad del clientelismo del gobierno de turno y de sus aliados políticos de miras a las próximas elecciones.
De esta forma, degenerando la democracia y polarizando aún más la sociedad. Además, los ricos más ricos y la clase media desapareciendo y aumentando la clase más desfavorecida. Y lo más repudiable, con parte de estos ingresos se comprarán aviones de guerra para una eventual confrontación bélica.
Es decir, los colombianos más débiles financiarán la campaña de los que ostentan el poder presente para la continuidad de los que históricamente se han equivocado dirigiendo el país.
Así pues, la agitación social y los trabajadores del Estado deberán ser protagonistas de lo que le resta de periodo a Duque. Estas reformas que sin duda son necesarias, tienen líos en la forma en que han sido presentadas; ya que golpean inmisericordemente a la clase media y trabajadora del país, generando más inequidad, expropiando a la clase media y pauperizando a los trabajadores del Estado.
