En el año 2020, en plena pandemia, un grupo de artistas de joropo oriundos de municipios de Casanare y de su capital Yopal, se unieron para hacer una canción en homenaje a Israel, por la conexión existente entre el departamento y el pueblo judío.
La canción se lanzó para presentar un evento llamado Casanare Bendice a Israel y que pertenece al cantautor Wilmer Garcés. A la composición se reunieron otros queridos músicos de esta región del llano como Joel Íbica, Rafael Vargas, Saúl Silva, Celiano Jiménez, Ariel Leal, Walter Silva, Ariel Jiménez, Brisel Vega, Yostimar Prada, Damián Santana, Yesid Ortiz y Aldrumas Monroy.
Casanare Bendice a Israel, es un evento que se comenzó a organizar en el 2017 en la ciudad de Yopal, capital de este departamento llanero. Y se presenta como una ocasión de agradecer al pueblo de Israel por su legado religioso.
Wilmer Garcés fue precandidato para la gobernación del Casanare en las últimas elecciones, pero fue derrotado y actualmente el primer mandatario del departamento es César Ortiz Zorro.
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¿Qué es el joropo, la música que caracteriza a municipios de Casanare y regiones cercanas?
El joropo es una expresión cultural emblemática de Venezuela y Colombia, que encapsula la esencia de la tradición musical y dancística de estas regiones. Este género musical, que también se manifiesta a través de una danza característica, tiene sus raíces en la época colonial, donde comenzó como una fusión de ritmos traídos por los colonizadores españoles y los sonidos autóctonos de los pueblos indígenas.
Con el paso del tiempo, el joropo se ha diversificado en varias formas, cada una con sus particularidades dependiendo de la región. Sin embargo, todos comparten el uso de instrumentos típicos como el arpa llanera, el cuatro (un tipo de guitarra pequeña), las maracas y, en algunas variantes, la bandola. Estos instrumentos son la base para crear un ritmo vibrante y acelerado que es distintivo del joropo.
La danza del joropo es tan vital como la música, caracterizada por un zapateo fuerte y rápido que sigue el compás de la melodía. Los bailarines, con trajes coloridos, ejecutan movimientos complejos que requieren habilidad y coordinación, a menudo en parejas que giran y se entrelazan al ritmo de la música.
El joropo no es sólo un género musical o una danza, sino que es una celebración de la vida y la comunidad. Las fiestas de joropo son eventos sociales importantes donde la gente se reúne para compartir música, baile y camaradería. En estos eventos, el joropo actúa como un hilo conductor que une a las personas, independientemente de su edad o procedencia social.
El joropo es más que una manifestación artística y hace parte del del patrimonio cultural de Venezuela y Colombia. Su música y danza continúan evolucionando, pero siempre manteniendo el espíritu alegre y la riqueza cultural que lo han definido durante siglos.
