La Secretaría General de la Alcaldía de Bogotá le ha servido a Claudia López para contratar a sus más altos asesores de confianza más allá de las propias secretarías. Y la inversión ha sido grande. Desde que asumió el cargo el 1 de enero de 2020 ha contratado $9.300 millones con 20 personas.
Quienes han sido contratados a través de la Secretaría General se han desempeñado como asesores jurídicos, revisores fiscales o estrategas para diversos proyectos TIC, además de algunos contratos destinados para el arrendamiento de edificios en los que la Alcaldía opera diferentes dependencias.
Sin embargo, los tres primeros contratistas son personas de toda la confianza de la alcaldesa. Cuando Claudia López se metió en política encontró en la agencia Brújula Comunicaciones a su mejor aliada. Todo comenzó en 2014, cuando la entonces investigadora y columnista decidió lanzarse al Senado con el Partido Verde. López contaba con una gran popularidad por sus denuncias, pero debía convertirla en votos. Y para ello buscó a Ana María Ruiz y a Guillermo Augusto Cuellar, fundadores y directores de Brújula, especializada en comunicaciones políticas, corporativas y de crisis.
A López siempre le fue bien con la agencia. En su estreno electoral logró una curul con la votación más alta del partido, incluso por encima de Antonio Navarro Wolff. En 2018 como fórmula vicepresidencial de Sergio Fajardo también recibió el consejo de sus buenos amigos y ese mismo año, después de las elecciones presidenciales, adelantó la consulta anticorrupción, que se votó el 26 de agosto, apenas 19 días después de la posesión de Iván Duque. Otra vez, la encargada de hacer el despliegue comunicativo y publicitario estuvo a cargo de Brújula.
Ana María Ruiz ha sido tan cercana a Claudia López y Angélica Lozano, que fue en su apartamento donde celebraron el triunfo. Tomó las riendas de Canal Capital en enero de 2020 mientras Guillermo Cuellar desde entonces ha firmado tres contratos con Secretaría General para asesorar a la alcaldesa López en comunicaciones, por un total de $767 millones. Los contratos tienen objetos muy similares, “prestar servicios altamente calificados para asesorar al despacho de la alcaldesa mayor de Bogotá D.C. y a las entidades distritales en la generación de desarrollo y coordinación de los lineamientos distritales en materia de comunicación pública”.
El contrato más reciente con la secretaría lo firmó el 14 de enero de 2021 por $393 millones. Apenas diez días después Cuéllar firmó otro contrato, esta vez con la Secretaría de Cultura, por $107 millones y el pasado 26 de enero firmó uno más por $126 millones. Entre los contratistas como personas naturales, Cuellar es el que más ha recibido recursos desde que comenzó la alcaldía de López.
Entre el top de contratistas de la Secretaría General también está Flor Marilyn López, quien también asesora en comunicaciones al despacho de la alcaldesa desde 2021.
Marilyn López se creció en el asesoría política de la mano de Rafael Pardo, quien apoyó la candidatura de Claudia López y luego fue la jefa de comunicaciones de la Casa de Nariño en la recta final del gobierno de Juan Manuel Santos y antes de terminar el gobierno fue nombrada cónsul de Colombia en Barcelona. Ya de regreso en Colombia, Marilyn López se asoció con Juan Mesa y creó su propia empresa.
Llegó a la Alcaldía por la vía de Rafael Pardo, con quien siempre ha trabajado y quien la acercó a Juan Manuel Santos, con quien trabajó también en la fundación Buen Gobierno. Pardo apoyó la campaña de Claudia López y tiene juego en el gobierno distrital. El actual secretario de gobierno Luis Ernesto Gómez también se formó políticamente a su lado.
El 19 de marzo de 2021 López firmó un contrato por $346 millones con un objeto muy similar al último firmado por Cuéllar con la Secretaría General. Sus roles son tan parecidos en el papel que los dos son asesores “altamente calificados”. Y el pasado 13 de enero López firmó el mismo contrato que Cuellar había suscrito en 2021 como asesor, incluso por el mismo valor: $393 millones.
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La alcaldesa López puso en manos de la arquitecta María Mercedes Jaramillo su proyecto más ambicioso: sacar adelante el nuevo Plan de Ordenamiento Territorial de Bogotá (POT).
Jaramillo, con una larga trayectoria profesional y académica, es la actual secretaria de Planeación de la alcaldía y entró al círculo cercano de Claudia López a través de su esposo, el asesor y también arquitecto Felipe Morales, quien fue el gerente de campaña de López para la Alcaldía pero ha trabajado con ella desde su primera campaña en 2014. El papel de Morales, quien ha tenido varios contratos de asesoría con la Alcaldía y la Secretaría General, fue fundamental para llegar al cargo. Desde allí, recogió la producción de Córdoba y se dio a la tarea de empezar a difundir una norma muy polémica por sus planes de expansión de Bogotá.
Felipe Morales ha tenido cuatro contratos con la Secretaría General por $592 millones entre 2020 y 2022. El más reciente lo firmó en enero de este año por $197 millones para “Prestar servicios profesionales especializados al despacho de la Alcaldesa Mayor y a la Secretaria Privada, apoyando la realización del seguimiento de los proyectos estratégicos al Plan Distrital de Desarrollo Económico, Social, Ambiental y de Obras Públicas para Bogotá D. C.”
La alcaldesa Claudia López le ha dado prioridad a la contratación de asesores de comunicaciones que le han costado por lo menos $1.400 millones, sin embargo, su administración ha sido muy criticada, precisamente, por sus falencias a la hora de transmitir sus decisiones y políticas, algo que le ha pasado factura en su aprobación, y en el bolsillo de los bogotanos.