La nostalgia vende porque es necesario mirar atrás para saber hacia dónde ir a futuro y/o de paso saber en dónde se está hoy día.
Por eso fue importante esa década en Bogotá, en palabras del mismo Mario Duarte cantante de La Derecha “esta ciudad era sucia, insegura, puro concreto gris y sobre todo la juventud no tenía nada para hacer”.
Eso dio entonces para que se creara una movida musical más que rebelde, “rompedora”, cogió cosas del punk y de lo que sonaba en esa época (Alice in Chains, Soundgarden, Nirvana) y lo colombianizaron bandas como Aterciopelados (antes se llamaban Delia y los aminoácidos) y La Derecha.
Algo se tenía que hacer en esa ciudad de mierda.
El circuito de bares “alternativos” en la Candelaria, la 82 y Cedritos -muchos de ellos creados por Héctor y Andrea- además de poner a los Pixies, Nine Inch Neils, Beck, etc., les dio espacios para presentarse a las 1280 Almas, Catedral (después Ultrágeno) y muchas otras bandas. La movida entonces se consolidaba.
30 años después La Derecha vuelve a lanzar en plataformas su segundo LP “Balas de bebé y otras canciones de cuna”, con mejor sonido, pero con ese sabor noventero y lo más importante, suena a Bogotá, se vuelve banda sonora de la ciudad.
Hace unos meses las 1280 Almas relanzaron volviendo a grabarlo en su totalidad su segundo Álbum, la 22, habían tenido por décadas problemas de derechos con la disquera de esa época BMG que al fin se solucionaron.
Es un disco definitivo, tiene punk, rock, ska, cumbia y salsa y las letras hablan de un país violento a más no poder, casi inviable de tanta sangre “En la fosa no se sabe si esas son o no tus manos, amasijo de cadáver, tal vez un mundo cristiano, o te suben a un tren militar”, dice la letra del Platanal, pero con canciones/himno para bailar en modo alegría como Marinero. Es decir, si había algo parecido a la esperanza.
Otro trabajo que suena a Bogotá en sus 19 canciones de no más de 3 minutos cada una.
Y para rematar se acaba de anunciar un musical llamado “Florecita Rockera, una historia aterciopelada,” con la participación de Ramiro Meneses, Cony Camelo y 23 artistas más. Se hará videomapping sobre la capital de esa década en su escenografía y una historia ficcionada entre una gomela y un punketo.
Se hará un preestreno en el Jorge Eliécer Gaitán el 15 y 16 de noviembre y funciones en el Astor Plaza desde el 21 de ese mismo mes de jueves a domingo.
No hay duda, entonces, la onda retro noventera Bogotana vuelve a sonar. Se necesita saber de dónde se viene sobre todo cuando el presente y el futuro no están muy claros.