La Federación Nacional de Pesca de Colombia (Fenalpesca) considera importante entender las particularidades del sector pesquero colombiano, sobre todo en la parte artesanal, pues esta situación afecta las necesidades de subsistencia de los pescadores artesanales, poniéndolos en estado de vulnerabilidad e indefensión.
Prohibir por decreto la pesca de tiburón no cambiará la realidad de la pesca incidental en las faenas pesqueras artesanales, pues los pescadores no pueden controlar que un tiburón muerda el anzuelo o caiga en su red, ¿acaso esto conducirá a los pescadores a ser ilegales cuando ocurra? ¡Atención a esto!
La solución para maximizar la protección de ciertas especies de tiburón no es la prohibición por decreto, sino el impulso de medidas de ordenamiento del sector, a través del fortalecimiento de la Aunap, que le permitan realizar una eficaz vigilancia y control de la actividad, como propone Fenalpesca.
Reiteramos que los pescadores artesanales no practican el aleteo (asesinato del tiburón solo por su aleta). Tampoco hay una flota que tenga una pesca dirigida al tiburón, por lo que lo que se pesca es incidental (sin querer o accidente) y cuando ocurre el tiburón se come completo, no se desperdicia nada. En Colombia hay hambre, todo se aprovecha.
En consecuencia, Fenalpesca solicita a instituciones, universidades y medios que hacen eco de esta situación que no caigan por desconocimiento, error, falta de datos y estudios serios y precisos que incluyan también los sociales y económicos, o por otros intereses en comentarios facilistas o amarillistas, y apliquen el mayor rigor, seriedad y veracidad en la información.
Así mismo, está a disposición de los colombianos para dar la información que otorga elementos de juicio para evaluar las soluciones que proponemos, sin inventar, prohibir o insultar, pues hay soluciones efectivas para ser sostenibles y proteger el medio ambiente sin ilegalizar a los pescadores.
Las ofertas de compensación a los pescadores por prohibición de pesca de ciertas especies, son difícilmente aplicables por su complejidad y altísimos costes (no existe una evaluación económica de esto) y de todas formas la pesca incidental igual continuará de forma incidental. ¡Para no pescar tiburón se debería cesar la pesca totalmente y son 400.000 pescadores!
Es absurdo que se haya llegado a insultar a los pescadores señalándolos de depredadores del mar, asesinos de tiburones, cuando está demostrado que en Colombia no existe el aleteo (práctica que realizan otros países, algunos vecinos, para sacar solo la aleta del tiburón). Muy muy muy delicado.
Colombia no ha realizado los Dictámenes de Extracción No Perjudicial (Denp), por lo que no hay sustento científico para esto, tampoco ha habido concertación social ni evaluación de consecuencias, con alcances insospechados, pues se afecta seguridad alimentaria de comunidades vulnerables.
Fenalpesca siempre está atenta a colaborar con las instituciones en la mejora de las prácticas pesqueras, pero la falta de socialización y consultas con la comunidad pesquera y dueños del territorio, consejos comunitarios afrodescendientes y resguardos indígenas es muy delicada y amerita pausa.