Aunque el alcalde Carlos Fernando Galán se movió para logra neutralizar el ascenso hacia las directivas del Concejo de Bogotá de Juan Daniel Oviedo, igual llegó a la vicepresidencia Ana Teresa Bernal quien ha liderado la oposición desde que llegó al Concejo hace cuatro años.
Pero está vez tienen presencia dos fuertes concejales, cuya vigilancia tiene eco en los medios como son Daniel Briceño, que, aunque milita en el Centro Democrático, es independiente en sus posturas, y el candidato a la alcaldía que logró la segunda votación Juan Daniel Oviedo.
Galán cuenta con el apoyo de la coalición mayoritaria compuesta por: el Partido Liberal de María Victoria Vargas, el Partido Verde, el Nuevo Liberalismo, el Conservador, así como los dos concejales del Mira, Rolando González de Cambio Radical y el Centro Democrático, bancada a la que pertenece el concejal Daniel Briceño, quien aseguró que se moverá como independiente. Sus casi 42.000 votos los quiere hacer pesar como un vocero de la gente vigilante.
Ha conformado una poderosa Unidad de Apoyo Normativo con solidez técnica para mantener la vigilancia sobre la administración Galán. Su mano derecha es Harry Ramos, pero cuenta con dos abogados para los temas jurídicos, dos economistas y financieros para hacer seguimiento a las finanzas del distrito, 1 asesor en comunicaciones, 2 asesores más para atender a la comunidad en temas de denuncias, 2 para temas digitales, datos y contratación estatal.
Briceño definió ya tres escenarios de trabajo. Le pondrá la lupa al gasto público, donde le hará una vigilancia especial al detrimento de las finanzas públicas. El segundo es que trabajará en toda una apuesta normativa para eliminar los trámites engorrosos de todas las entidades del distrito, como, por ejemplo, los que hay en la Secretaria de Planeación y Catastro para acceder a conceptos de usos del suelo, al POT y trámites para habilitación de negocios como panaderías y ópticas.
Él asegura que se deben llenar muchos formularios, visitar 3 y más funcionarios en una entidad como la Secretaria de Salud y además deben pagar por eso. Hay que simplificar trámites y eliminar los pagos para que sean gratuitos para los ciudadanos que ya pagan un impuesto.
Dos contratos específicos le huelen mal. Por un lado, está un contrato que suscribió Bomberos Bogotá por $ 14 mil millones de pesos para la compra de máquinas extintoras donde se entregó un anticipo por $ 6 mil millones de pesos que están embolatados porque la unión temporal Cuatro por Cuatro de Alpecorp Colombia, quien se quedó con el contrato y fue sancionada e inhabilitada en noviembre de 2023.
Por el otro, está la empresa la Rolita, a quien se le adjudico la operación del transmicable de ciudad Bolívar y la cual está a punto de caerse en el tribunal administrativo de Cundinamarca donde cursa una demanda por su conformación que fue mal tramitada en el Concejo de Bogotá, una de las propuestas estrella de la alcaldesa de Bogotá para mejorar la movilidad en Bogotá.
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