El impacto educativo de la pedagoga Francisca Radke fue contundente y se extiende mucho más allá de las aulas del Instituto Pedagógico Nacional. Su obra ha influido en generaciones de maestros que continúan su misión de educar con innovación, equidad y compromiso social. En la actualidad, la Universidad Pedagógica Nacional es un testimonio vivo de su legado, reafirmando que la educación es la herramienta más poderosa para transformar una nación
¿Quién fue Francisca Radke?
Francisca Radke, nació en 1892 en Aquisgrán, Alemania, cerca de las fronteras con Bélgica y Países Bajos. Estudió en las universidades de Bonn, Berlín y Marburgo. Con un doctorado en filosofía, se especializó en pedagogía, filología, idiomas y geografía. En Colombia, introdujo conceptos innovadores como la escuela activa, el enfoque en los derechos de las mujeres y la educación inclusiva, destacando su compromiso con el progreso social.
Francisca Radke, la pedagoga alemana
En el corazón de la educación colombiana se encuentra el legado de Francisca Radke, que marcó un antes y un después en la formación de maestros. Su obra, materializada en la fundación del Instituto Pedagógico Nacional para Señoritas en 1927, sentó las bases para lo que hoy es la Universidad Pedagógica Nacional, una institución con más de 10.000 estudiantes y epicentro de la formación docente en Colombia.
Declarado Patrimonio Histórico y Cultural de la Nación en 2018, este instituto ha sido reconocido con importantes condecoraciones como la Orden de Boyacá, la Orden Civil al Mérito "José Acevedo y Gómez" y la Cruz de Oro Simón Bolívar.
Radke y la revolución educativa: 1926-1936
Radke llegó a Colombia en 1926 como parte de la Segunda Misión Pedagógica Alemana. Durante el gobierno de Miguel Abadía Méndez, creó el Instituto Pedagógico Nacional para Señoritas en Bogotá. La institución comenzó con 70 alumnas provenientes de diversas regiones, que serían formadas para llevar educación de calidad a sus comunidades.
Transformaciones a lo largo del tiempo
1930-1950. Consolidación
Bajo la dirección de Francisca Radke, se introdujeron cursos de capacitación para docentes e inspectores, marcando un avance en la calidad educativa. En 1936, Francisca Radke regresó a Alemania y la dirección pasó a la pedagoga colombiana Esther Arana Mantilla, quien lideró hasta 1948.
1952-1970. De instituto a universidad
En 1952, Francisca Radke volvió a Colombia y lideró la transformación del Instituto en la Universidad Pedagógica Nacional Femenina en 1955. Esta nueva etapa incluyó:
1968. Educación mixta: abriendo sus puertas tanto a hombres como a mujeres.
1970. Programas de educación especial: para atender a niños con necesidades educativas específicas.
1970. Nueva sede: tras el terremoto de 1967, la institución se trasladó al norte de Bogotá, consolidándose como un centro educativo integral.
1994-Presente. Evolución académica
La última promoción de normalistas se graduó en 1994, y desde entonces, el instituto se convirtió en una unidad académica y centro de prácticas de la Universidad Pedagógica Nacional.
El modelo de Radke introdujo prácticas innovadoras:
El Método Montessori: implementado en el primer jardín infantil público del país, conocido como "La Casita de la Vida".
La Educación integral: Incluyó la enseñanza de música, teatro, pintura y escultura.
La profesionalización docente: las estudiantes eran certificadas como "institutoras" profesionales, capacitadas para enseñar en primaria.
La educación integral: incluyó la enseñanza de música, teatro, pintura y escultura.
La profesionalización docente: Las estudiantes eran certificadas como "institutoras" profesionales, capacitadas para enseñar en primaria.
La Fundación Francisca Radke
Fue creada en 1991 en reconocimiento a la vida y obra de Francisca Radke, que fue pionera del sistema educativo en Colombia e impulsadora de la profesionalización de la carrera docente.
Se estableció el Premio Nacional Fundación Francisca Radke, el cual ha llegado a la versión XVII, que cada año realiza esta condecoración en reconocimiento a la vida y obra de Francisca Radke. Tiene como objetivo fomentar la investigación aplicada en educación para abordar problemas concretos y satisfacer necesidades específicas en la formación de estudiantes y profesionales para el siglo XXI. Además, busca destacar a un educador cuya vida, obra y ejemplo puedan ser un modelo para otros educadores y la sociedad en general. Desde su creación, se han galardonado 46 trabajos y se ha reconocido la vida y obra de 16 investigadores dedicados a la educación.
El trabajo de Radke no solo transformó el sistema educativo colombiano, sino que también promovió valores como la igualdad de género y la creatividad en la enseñanza. Su visión sigue siendo un pilar en la formación docente, asegurando que los maestros sean agentes de cambio en sus comunidades.
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