En los años ochenta nadie era más galán que Julio César Luna. Actor, director, una estrella absoluta de la televisión, Luna, como tantas otras glorias nuestras, ha sido marginado por un sistema que no cree en la sabiduría que dan los años.
Siempre crítico contra las injusticias, el maestro Luna se quejó de la repetidera de RCN con Betty la Fea -ya van cinco veces que la pasan-y le exigió al canal en un Twitter que le diera más trabajo a los actores: