El presidente Juan Manuel Santos le había ofrecido este cargo diplomático a su gerente de campaña Roberto Prieto pero este puso sobre la mesa una posible incompatibilidad, no jurídica pero si ética, por cuenta de los contratos que la empresa de su familia, Marketmedios, tiene con el gobierno. Santos optó entonces por su asesor de comunicaciones y exsecretario en su primer periodo de gobierno, Juan Mesa, quien desde que se retiró de Palacio dirige la firma Cano & Mesa Comunicaciones Estratégicas, en asocio con Camilo Cano que asesora empresas del sector público y privado.
Juan Mesa le ganó el pulso a Roberto Prieto y se quedó con la embajada de Italia
Santos le había ofrecido el cargo al gerente de su campaña quien estaba despejando una posible inhabilidad ética