“Si Pinochet estuviera vivo, votaría por mí”. Líder del Partido Republicano, 57 años, nacido en Santiago de Chile y de enorme habilidad dialéctica, a José Antonio Kast Rist no le tiembla la voz. En la campaña presidencial del 2017 pronunció esa frase de amplia recordación. Le dicen el Bolsonaro chileno o el Trump chileno. Pero más allá de los rótulos, Kast el líder de la extrema derecha que con su Partido Republicano acaba de ganar contundentemente las elecciones constituyentes que eligen los 50 consejeros que redactarán la nueva constitución.
Es la revancha del político que en la segunda vuelta presidencial perdió ante Gabriel Boric, la joven promesa de la izquierda. Kast, evidentemente, no es un recién llegado a la política. En la Unión Demócrata Independiente (UDI) empezó la carrera política desde concejal, diputado, jefe de bancada y miembro del Congreso. Fue candidato independiente a la presidencia, en las elecciones del 2017 en las que consiguió el 7,93 % de los votos en la primera vuelta de la elección que en segunda ganó Sebastián Piñera. Formó entonces el Movimiento Acción Republicana que antecedió a este Partido Republicano de Chile con el que buscó llegar al Palacio de la Moneda en las elecciones presidenciales de marzo de 2022.
JAK ha sido ante todo un político y esa vena es de familia. Sus orígenes están en el viejo continente. Encabezada por su padre, Michel Kast Schindele, oficial en las fuerzas armadas de la Alemania nazi, Wermacht, y la madre Olga Rist, la pareja, que tuvo nueve hijos, llegó a Chile en 1950. Miguel, su hermano mayor, fue ministro de Augusto Pinochet, director del banco central y uno de los Chicago Boys; Bárbara, su sobrina, ha sido concejala de Paine; Felipe ha sido senador y Pablo diputado. Ambos también son sus sobrinos.
Está casado con la abogada Pía Adriadola con quien tiene nueve hijos, ocho de los cuales aún viven en la casa paterna de Buin, a las afueras de Santiago. El que tiene un rol importante es el mayor, llamado también José Antonio y como su padre es abogado de la Universidad Católica, político y director de la fundación Influyamos, muy cercano políticamente a él. Todos sus hermanos participaron en la campaña política del 2017, de la que todavía se recuerdan los jingles en coro al estilo de la familia Trapp.
La campaña presidencial de Kas, hace dos años, tuvo el estilo gerencial que le imprimió Julio Feres, con quien JAK se conoce desde hace 36 años cuando ambos hacían parte del movimiento gremial, y Feres optó por el mundo empresarial donde estuvo hasta hace diez años cuando fundó su propio e-commerce: sucasa.cl.
Kast tiene un círculo de hierro que es un sólido grupo con el que lleva trabajando varios años. En la campaña presidencial estuvo con Feres la periodista Carolina Araya que hizo parte del equipo de las presidenciales de 2017, el abogado Ignacio Dulger, el también abogado Cristian Valenzuela un viejo amigo que viene desde la UDI. Kast tiene el apoyo de la Fundación Jaime Guzmán, el fundador de la UDI y asesor de Pinochet.
En la campaña del 2017 el foco de JAK estuvo en evangélicos y militares, pero ha dado un giro. Desde la campaña presidencial y ahora les apuesta a las redes sociales: Twitter donde está el mundo político, y hacia Instagram y Tik Tok para llegar a los jóvenes. Polémico en Twitter, JAK también lo es en viejas iniciativas como construir una enorme zanja en el norte de Chile para detener la inmigración o quitar las rejas de las casas para usarlas en las cárceles, o al exhibir su foto con Jair Bolsonaro y la camiseta roja de la selección chilena de fútbol. Aún se recuerda el tono polémico de su debate televisivo enfrentando duramente a Gabriel Boric, el diputado del Frente Amplio que, en alianza con el Partido Comunista, punteaba holgadamente los sondeos y ganó la presidencia.
Desde las redes rechaza el aborto, manifiesta su admiración por Trump, Bolsonaro y los logros de Santiago Abascal con Vox en España. Desde allí se opuso al plebiscito de la constituyente desde octubre del 2021. Y ha lanzado una pregunta. “Dicen que soy extremo. ¿Extremo en qué? En amar la Patria. En amar la Nación y los símbolos patrios. En defender a los amigos. En proteger al emprendedor. ¿En qué soy extremo?
Este domingo, tras conocer los resultados, tampoco le tembló la voz, y dijo: “Chile ha derrotado a un gobierno fracasado”.
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