Por algo es el mejor manager del mundo. Sus apoderados están seguros de que ganarán bien y jugarán en ligas importantes. James Rodríguez no juega hace cinco meses y eso que lo hace en una liga tan poco competitiva como la catarí. Su sueño era regresar a Europa y lo quiso intentar en una gran liga como la española. Llegó a sonar para el Valencia español pero la negociación fue sólo humo esparcido por la prensa pagada por el manager portugués. Pero nadie lo quiso. El Valencia se burló de la propuesta. También fue ofrecido a la liga norteamericana pero la MLS incluso se molestó con los comentarios desobligantes contra el fútbol gringo. Es que hizo referencia a que este fútbol era un cementerio de elefantes.
Entonces, en paracaídas, llegó al Olimpiakos y estará al lado de Marcelo, el mítico lateral brasilero. Ahora James deberá demostrar que es más que una ruina griega, tal y como lo están diciendo en Twitter todos aquellos que se sienten defraudados por una mega estrella que nunca llegó a ser.