Nuestro flamante mandatario, Iván Duque, dio un paso en falso, impensable e inesperado, el pasado viernes 13 de agosto.
Ocurrió durante su discurso ante la plenaria de la Andi. Para referirse a la dureza de la ley contra la corrupción que cursa en el Congreso, plagió nada más y nada menos que a Sor Juana Inés de la Cruz. Y fue plagio porque de haber sido cita, al menos hubiera tenido la delicadeza de señalar: "Como dijo fulana", o "como dice un poema"... En fin, pero no hubo tal referencia.
En la estrofa catorce el poema Hombres necios se dice:
La que peca por la paga
o el que paga por pecar
Duque cambió 'la' por 'el' (en el primer verso). Sacó pecho, miró al auditorio como quien promulga un ucase, e hizo el descarado robo. Ahora ya no solo se apropian de los dineros públicos, sino de la poesía más culta. Ni se imagina Duque lo ridículo que se vio baboseando inteligencia a caballo sobre Juana de América. No tiene nada de raro que una vez finalice su presidencia nos sorprenda con un poemario.
A los escuchas del Noticiero Caracol de ese medio día nos queda el consuelo de que con toda seguridad, ninguno de los burócratas y ejecutivos de la Andi ahí presentes tiene la más mínima idea de quién es Sor Juana Inés de la Cruz.
Presidente Duque, ya que no respeta al país, por lo menos respete la propiedad intelectual.