Un nuevo nombramiento viene a sellar la revolución que está viviendo la Academia Colombiana de la Lengua. Se trata de la escritora española Irene Vallejo, nombrada hace una semana como miembro de la Academia en calidad de extranjera.
Vallejo es hoy por hoy una estrella rutilante de la literatura internacional gracias al ensayo de su autoría que se ha convertido en uno de los libros más vendidos en los últimos años: El infinito en un junco (Siruela, 2019), la historia de los libros desde la invención del papiro hasta nuestros días.
Luego de la explosión en ventas que supuso esta obra (elogiada por titanes de la Literatura como Mario Vargas Llosa), la española no ha parado de girar por el mundo. Justamente estuvo en Colombia en abril de este año no solo para la edición de la FilBo sino invitada por su colega, la escritora y gestora cultural colombiana Velia Vidal, con quien recorrió Quibdó para conocer la región y compartir su conocimiento con quienes se dedican al fomento de la lectura, la escritura y la oralidad en el departamento de Chocó.
Tal vez le interese: La afamada escritora Irene Vallejo quedó grabada para siempre en el corazón del pueblo chocoano
Pero este nombramiento es apenas la más reciente sorpresa que la Academia Colombiana de la Lengua ha dado con los respectivos nuevos miembros
Si el de Vallejo ha sorprendido gratamente (ahora compartirá silla de miembro correspondiente extranjero con su paisano Álex Grijelmo y con Sergio Ramírez, escritor nicaragüense perseguido por Daniel Ortega y quien aceptó la ciudadanía colombiana) lo cierto es que la Academia Colombiana —las más antigua del continente con 153 años de historia— suma y suma nuevos nombres más allá del típico perfil del académico tradicional.
Un primer aviso de ese cambio de orientación se dio en 2016, cuando fue elegido el periodista y escritor Daniel Samper Pizano. En abril de 2022 llegó otra sorpresa: la silla Rr fue dada al periodista de san Bernardo del Viento, Juan Gossaín, un hombre cuyo padre llegó a Colombia sin hablar una gota de español…
No obstante, el movimiento definitivo que concretó la nueva apuesta de renovación de la Academia se dio en 2023. Fue entonces cuando fueron admitidos de golpe siete nuevos miembros: aparte de tres académicas mujeres de gran prestigio (Agueda Pizarro, Myriam Constanza Moya y Mercedes Medina de Pacheco) los nuevos miembros incluían a Héctor Abad Faciolince, William Ospina, Juan Esteban Constaín y Juan Gabriel Vásquez, todos renombrados autores de la literatura nacional.
Ese reciente timonazo también incluye el nombramiento del recordado José Antonio Ocampo (primer ministro de Hacienda del Gobierno Petro), que hace parte de la Academia para verificar vigilar la inclusión de términos económicos.
Volviendo a Irene Vallejo, se sabe que quien tomó las riendas de la gestión para que la española fuera nombrada fue el exprocurador Fernando Carrillo, quien dijo de la obra de la española: “Las palabras de Vallejo son un bálsamo para esa Colombia que tenemos que construir con una nueva colombiana, que nos va a traer equilibrio y sensatez, que es lo que hace falta”.
En el discurso de aceptación del nombramiento como Académica Correspondiente Extranjera de la Academia Colombiana de la Lengua (que puede leer completo aquí), la también filóloga reconoció su amor por Colombia y el lazo que la une desde que empezaba como la más natural y corriente de las lectoras:
“Conocí Colombia por primera vez en la biblioteca de mis padres, en un lugar destacado descubrí los libros de Mutis y Márquez (...)” y reconoció nombres de la creación literaria nacional como Fernando Vallejo, Piedad Bonnett, Pilar Quintana, Emma Reyes y Juan Gabriel Vásquez, entre otros.
