El señor Aurelio Iragorri quien se desempeñó como Ministro del Interior, fue uno de los artífices de los abusos del Estado contra los campesinos, pues fue el estratega y gestor de los acuerdos incumplidos con los campesinos en el paro del año pasado, se caracteriza por su capacidad de demagogia, como de culebrero.
Con este nombramiento pareciera que el señor presidente Juan Manuel Santos no quisiera atender las necesidades y problemáticas del campo, pues para nadie es un secreto que Iragorri no está capacitado ni tiene conocimientos en agricultura, pero bueno, que se puede esperar de un Ministro que es nombrado no por meritocracia ni técnocracia si no por ser el nieto de un expresidente e hijo de un reconocido exsenador. En este país las familias Gaviria, Santos, Samper, entre otras, están acostumbradas a manejar el país a su antojo y como dice Samper en el libro Daniel Samper se deja de vainas: “se toman las decisiones del país desde el comedor de mi casa”.
Esto es una vergüenza pues como es posible que los problemas del país se discutan en un comedor familiar. La razón por la cual Santos nombró a Iragorri Valencia antiguamente como Ministro del Interior es que son amigos de infancia, gracias a la antigua relación de las familias Santos y Valencia. Nada raro que en un tiempo veamos al señor Iragorri como el principal defensor de multinacionales como MONSANTO, con el fin de cumplir los acuerdos del TLC con Estados Unidos desplazando cada vez más la producción nacional agropecuaria, es oportuno mencionar que las semillas certificadas de MONSANTO, en varios cultivos que se han probado en Colombia, no han arrojado resultados satisfactorios, generando pérdidas de cosechas y crisis financiera entre los agricultores y campesinos que las han probado.
El perfil de Iragorri es de pregrado en derecho y postgrado en mercadeo y administración, ya lo veremos haciéndole micos a las políticas y proyectos para el campo, presidente Santos así no se soluciona la crisis agraria, debe colocar gente técnica y con estudios previos en temas agrícolas, no colocando a sus mejores amigos en carteras tan importantes como la de Agricultura, la verdad no veo muchas esperanzas para el mejoramiento del sector agropecuario, fue un grave error ese nombramiento presidente Santos.
Por último se espera que el nuevo Ministro cumpla los 88 acuerdos del paro pasado que no cumplió el exministro Lizarralde, que condonen las deudas de los agricultores y campesinos y que brinden mayor crédito. No olviden que aunque al agro le asignan un presupuesto, extrañamente esa plata nunca se ve invertida en hechos concretos que beneficien y le den soluciones al sector agropecuario.
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