La lucha contra la tecnología por el temor de que nuestros quehaceres desaparezcan y soportar con nostalgia los cambios culturales que ello implica, es una lucha perdida, muchos nos dedicamos a escribir, muchos aprendimos taquigrafía, muchos resolvemos problemas matemáticos con una hoja de papel y un lápiz y podemos, quedando ahora frente a la decisión de enfrascarnos en una guerra generacional fundamentada en el hecho del fortalecimiento que se logra con las dificultades, o aceptar que en esa programación biológica de dominio del entorno, siempre buscamos abarcar las actividades de la manera más eficientemente posible e incorporar los nuevos desarrollos a nuestras actividades y simplemente registrar, con el valor que se merece, la historia de que antes se hacían las cosas de manera diferente.
La inclusión de la Inteligencia Artificial (IA) en el sistema educativo colombiano, es necesaria. Es una tendencia que se está desarrollando a nivel mundial, debemos aumentar la capacidad de respuesta de nuestras instituciones para no enviar a la sociedad y al mercado laboral, miles de personas en condición de desventaja . Según un informe de Markets and Markets, se espera que el mercado de la educación basada en IA alcance los $3.68 mil millones de dólares en 2023, con una tasa de crecimiento anual compuesta del 45.2% durante el periodo de 2018 a 2023.
La implementación de la IA en la educación podría tener un gran impacto en el aprendizaje de los estudiantes. Un estudio de la Universidad de Stanford encontró que la personalización de la educación con la IA mejoró el rendimiento académico de los estudiantes en un 30%. Además, un informe de Pearson indica que la IA también podría ayudar a reducir la deserción escolar en un 25%.
En cuanto a la evaluación del aprendizaje, un estudio realizado por la Universidad de Michigan encontró que la IA puede evaluar las habilidades de escritura de los estudiantes de manera más precisa que los docentes humanos, con una precisión del 94% en comparación con el 92% de los docentes humanos. Además, la automatización de las evaluaciones podría ahorrar tiempo y esfuerzo a los docentes, permitiéndoles enfocarse en otros aspectos importantes de la enseñanza y tratar de eliminar un poco la subjetividad en el proceso de calificar, aunque podemos decir con cierta emocionalidad, que es esa subjetividad la que vuelve humano el proceso educativo, pero es una discusión que ya se puede sostener con estos medios tecnológicos actuales.
La inclusión de la IA en el sistema educativo colombiano también podría mejorar la gestión educativa y la toma de decisiones. Según un informe de la UNESCO, el análisis de datos de la educación con la IA puede proporcionar información valiosa sobre el rendimiento de los estudiantes, la eficacia de los programas educativos y la asignación de recursos. Esto podría ayudar a las autoridades educativas a tomar decisiones más informadas y mejorar la calidad de la educación.
Para implementar la IA en el sistema educativo colombiano, es necesario una reforma curricular y la capacitación adecuada para los docentes. Según un informe de la Asociación de Maestros de EE. UU., el 87% de los docentes cree que la IA podría mejorar el aprendizaje de los estudiantes, pero solo el 32% se siente cómodo usando la tecnología en el aula. Por lo tanto, es fundamental brindar capacitación y apoyo a los docentes para que puedan integrar la IA en su enseñanza de manera efectiva.
Para incluir la inteligencia artificial (IA) en el sistema educativo colombiano en los niveles de primaria y bachillerato, es necesario que se lleven a cabo ciertas acciones y medidas. A continuación, se presentan algunas recomendaciones:
Formación de docentes: es fundamental que los profesores reciban capacitación en el uso de la IA en el aula y en la implementación de herramientas tecnológicas en los procesos de enseñanza-aprendizaje.
Diseño curricular: se debe incorporar la IA de manera transversal en los programas curriculares de primaria y bachillerato, a fin de que los estudiantes comprendan la importancia de esta tecnología en la sociedad actual y estén preparados para su uso en el futuro.
Implementación de herramientas tecnológicas: es necesario contar con recursos tecnológicos adecuados para el uso de la IA en el aula, como robots educativos, herramientas de programación, plataformas virtuales, entre otros.
Alianzas estratégicas: se deben establecer alianzas con empresas y organizaciones que trabajan en el desarrollo de la IA, con el fin de obtener recursos y apoyo técnico para su implementación en el sistema educativo.
Evaluación y seguimiento: se debe realizar una evaluación constante del impacto de la IA en el proceso de enseñanza-aprendizaje y realizar ajustes en el diseño curricular y en la implementación de herramientas tecnológicas.
De acuerdo con otro estudio, esta vez de la consultora McKinsey, la IA puede mejorar el aprendizaje en un 20-30%, reducir la carga de trabajo de los profesores en un 50% y personalizar la educación para adaptarse a las necesidades individuales de los estudiantes. Además, la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) señala que el desarrollo de habilidades en el uso de la tecnología, incluyendo la IA, es fundamental para el éxito de los estudiantes en la sociedad actual y futura.
Una clase de matemáticas que incluya inteligencia artificial (IA) podría tener varias características interesantes y novedosas. A continuación, se presentan algunas ideas de cómo podría ser una clase de matemáticas que incorpore la IA:
Tutorías personalizadas: los estudiantes podrían tener acceso a tutorías personalizadas basadas en IA. Estos sistemas podrían detectar las fortalezas y debilidades de cada estudiante y brindar apoyo individualizado para mejorar el aprendizaje.
Ejercicios y problemas interactivos: los estudiantes podrían resolver ejercicios y problemas de matemáticas a través de plataformas virtuales que utilizan la IA para brindar retroalimentación en tiempo real. Estos sistemas podrían adaptarse al ritmo y nivel de cada estudiante y ofrecer recomendaciones personalizadas.
Uso de chatbots: los estudiantes podrían utilizar chatbots basados en IA para resolver dudas y preguntas relacionadas con el aprendizaje de matemáticas. Estos sistemas podrían ofrecer respuestas precisas y rápidas a las consultas de los estudiantes.
Análisis de datos: los estudiantes podrían utilizar la IA para analizar datos y estadísticas en el aprendizaje de matemáticas. Los sistemas de IA podrían ayudar a los estudiantes a comprender los datos de manera más efectiva y a tomar decisiones informadas en base a ellos.
Juegos educativos: los estudiantes podrían jugar juegos educativos que utilizan IA para enseñar conceptos matemáticos. Estos juegos podrían ser divertidos y emocionantes, lo que puede mejorar la motivación y el compromiso de los estudiantes.
La inclusión de la IA en una clase de matemáticas tiene el potencial de mejorar significativamente el proceso de enseñanza y aprendizaje. La IA puede personalizar la enseñanza, brindar retroalimentación en tiempo real, resolver dudas y preguntas, analizar datos y estadísticas, y hacer que el aprendizaje sea más divertido y emocionante.
Todo esto estaría montado sobre un entorno ideal, con estudiantes que quieren aprender y hallan disfrute en algo que realmente transforma su entorno, con docentes que también quieren aprender y se sienten dignificados, por tanto, el trabajo en el cambio de paradigma, preparar ese terreno boscoso de nuestro sistema educativo plagado de politización y algunas prácticas abusivas de recursos y condiciones, es otra tarea titánica que deberá abordar el gobierno del Cambio.
