Julian Esteban Gomez se volvió famoso en todo el país por su rostro conmocionado por la alegría después de que Egan Bernal estuviera en lo más alto del podio en Paris en el 2019. Esa imagen del niño Julián quedó desvanecida dos años después cuando la irresponsabilidad de un mulero acabó con la vida del niño que cometió un pecado: salir a a entrenar por las carreteras del país.
Tenía 13 años y el niño había salido a entrenar con su abuelo. El mulero, de manera irresponsable, cerró al niño y una vez lo atropelló el hombre, lejos de mostrar arrepentimiento, se bajó a pelear con el tio y el abuelo de Julián.
Lo indignante es que lejos de recibir un castigo el mulero salió libre.
Estas son las reacciones a lo que sucedió plasmadas en el informe de Noticias Caracol
