En 2022, la reforma tributaria fue aprobada, por lo que el impuesto saludable también recibió luz verde; esta es una iniciativa que busca incentivar hábitos alimenticios más sanos en la población colombiana. A partir del 1 de noviembre de 2023, este impuesto entró en vigor, impactando el precio de diversos productos ultra procesados y azucarados.
De acuerdo con lo expuesto por el portal Valora Analitik este impuesto ha generado un efecto negativo “El punto está en que esos precios de las galguerías en Colombia pasan factura a las ventas de los comerciantes del país, lo que supone que reciban menos ingresos y se generen más escenarios de estrés” reza el medio en cuestión.
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Según Fenalco, la encuesta de la Bitácora Económica evidencia que mientras que en enero la inflación de alimentos subió sólo 0,48 %, los precios de las golosinas y bebidas azucaradas incrementaron un 3,66 % y 1,22 %, respectivamente.
Adicionalmente, las carnes procesadas como salchichas subieron 1,64 %, es decir, “más de cuatro veces la inflación de alimentos, como consecuencia directa del impuesto a ultraprocesados, afectando sobre todo a las tiendas de barrio y a las familias de bajos ingresos”, aseguró el gremio.
El informe revela un panorama desalentador en cuanto a la creación de empleos, con un declive en el último trimestre. Las expectativas empresariales tampoco son optimistas, ya que el 71% de los encuestados pronostica que la situación se mantendrá igual o empeorará, mientras que solo un 29% anticipa una mejora.