La fuerza de las iglesias cristianas y sus pastores pesa tiene cada día mayores efectos en la vida política colombiana. Son más de 6 millones los fieles que pagan diezmos sino que siguen las directrices no solo espirituales sino de comportamiento electoral que indican sus jerarcas. En el resultado del No al Plebiscito por la paz mostraron su peso, así como el retiro de las cartillas de orientación sexual promovida por la entonces ministra de educación Gina Parody y en los 2.3 millones votos por el Plebiscito de Papa y mamá, para oponerse a la adopción de parejas del mismo sexo.
La realidad no va a ser distinta en las elecciones del próximo octubre en donde algunas movimientos cristianos tienen sus propios candidatos, mientras otros han entrado a co-avalar alcaldes, gobernadores, concejales y diputados. Lo cierto es que los pastores participan frontalmente en política en sus iglesias y no se van a quedar quietos. Estos cuatro pastores son los más poderos y jugarán duro en octubre.
La Misión Carismática Internacional, un movimiento creado por ella y su esposo, el Pastor Cesar Castellanos, en 1983. Treinta años después cuenta con más de 200 mil seguidores en Bogotá, sedes en 22 ciudades de Colombia y en veinte países. Las actividades fuera de la sede diplomática en Brasilia eran más las de una pastora a la caza de fieles que la el de una funcionaria pública. Su cercanía con el Presidente le daba licencia para actuar a su aire.
Misión carismática, Cesar Castellanos y Claudia Rodríguez de Castellanos
Claudia Rodríguez de Castellanos es la pastora mayor mientras su esposo, Cesar Castellanos, se ocupa de las tareas pastorales y organizativas de la iglesia. Trabajan en llave. Aspiró a la presidencia por el Partido Nacional Cristiano en las elecciones de 1989 en las que resultó elegido César Gaviria . Los 33.645 votos le dieron para lograr, un año después, dos escaños en la Asamblea Nacional Constituyente. Se estrenó como parlamentaria en el Congresito en 1991. En el trámite de la única ley que propuso para las mujeres cabeza de familia conoció a su colega el senador liberal Alvaro Uribe Vélez, de quien se volvería en su gran aliada en su proyecto político.
En los ocho años de Uribe el poder de Claudia Rodriguez de Castellanos y su iglesia creció significativamente, además de haberla nombrada Embajadora de Colombia en el Brasil donde se ocupó más por fortalecer la iglesia que de sus funciones diplomáticas de las que no salió bien librada. Las quejas por sus incumplimientos trascendieron las fronteras.
Construyeron una nueva sede de para el movimiento donde podían reunirse 16 mil personas. Fue la primera iglesia en ofrecer el servicio de datafono para recibir los diezmos y el gran auditorio se convirtió un atractivo lugar de encuentro para políticos de todas las corrientes que han hablado desde la tarima: Horacio Serpa, Enrique Peñalosa y, varias veces, Alvaro Uribe quien desde la primera aparición en la tarima arrancó ovaciones acuñando consejos moralistas como el que reclama: “Hay que aplazar la sexualidad. Ese gustico es para la familia”, un eco que resonó.
La última movida política fue haber logrado que su hija Sara Castellanos llegara a encabezar la lista del Partido liberal para el concejo de Bogotá en la que los votos de la Misión Carismática van a jalonar los golpeados liberales que con alianzas y co-avales buscan no salir del panorama político colombiano.
La Iglesia de Dios Ministerial de Jesucristo Internacional y el Partido Mira, Carlos Eduardo Guevara
Carlos Eduardo Guevara, actual senador de la República, quien pertenece a la Comisión Primera, el líder del Mira, el partido salido de las entrañas de la Iglesia de Dios Ministerial de Jesucristo Internacional, fundada por Maria Luisa Piraquive y su esposo Luis Eduardo Moreno. El Mira nació en el 2000 y se estrenó como fuerza electoral en las elecciones del 2002.
La iglesia tiene sede en este momento en 44 países, 1.000 templos en los cinco continentes y más de 2 millones de fieles. Carlos Eduardo Guevara reemplaza desde el año pasado a Carlos Baena, actual viceministro de trabajo, en la presidencia del MIRA. El apoyo del partido al candidato Iván Duque en las pasadas elecciones fue fundamental para que el candidato del Centro Democrático se impusiera
El lugar de su presencia, Andrés Corson
Andrés Corson tomó las riendas de la iglesia fundada por su abuelo, el pastor australiano Patricio Symes quien llegó a Bogotá en septiembre de 1933 acompañado de su esposa la galesa Elena Jones, cuando en solo existía en la capital del país, una iglesia protestante: la presbiteriana. Arrancaron con dificultad y su prédica en una Colombia católica y pacata, hasta que en febrero de 1936 se ubicaron en una casa en Tres Esquinas, en pleno Centro de Bogotá.
Sesenta años después, en 1993, su nieto Andrés tomó la palabra. Acompañado de su esposa Rocío y su papá Guillermo abrieron con un presupuesto de USD 400 en una casa esquinera en la calle 85 con carrera 18 que empezó con doce personas y bautizaron Amistad Cristiana. Permanecieron allí ochos meses hasta que se trasladaron a un nueva dirección en la calle 79 con carrera 9 en un local de la Sociedad Bíblica. Andrés tocaba el piano y animaba con música a los fieles que se acercaban mientras su esposa aseguraba la limpieza del espacio y hasta de la venta de pan a los escasos filigreses.
Cinco años después el traslado fue al barrio de la Castellana con el nombre que hoy conservan: El lugar de su presencia. Veinte años después cuentan con más de cincuenta propiedades repartidas en la ciudad, con sedes en Chiquinquirá y hasta en Dallas. Su equipo de trabajo supera las 200 personas, manejan millones en diezmos y su público juvenil se multiplica.
Centro Mundial de Avivamiento, Pastores Ricardo y María Patricia Rodríguez.
Es tal el poder de los pastores Ricardo y María Patricia Rodríguez que en el 2007 lograron hacer una ceremonia religiosa en el parque Simón Bolívar con 500 mil personas. Una variable política a la que le han coqueteado todos los candidatos presidenciales. Por el Centro Mundial de Avivamiento para ser ungido, como los viejos reyes europeos, por los dos pastores.
Empezaron con grupos de oración en 1990 en su apartamento en el barrio La Esmeralda del occidente de Bogotá. Una década después, en el 2005, en pleno gobierno de Álvaro Uribe, recibieron en el Congreso de la República la cruz de oro de la Orden de la Democracia Simón Bolívar. A los pastores no sólo le reconocían su santidad sino la capacidad que tenía para poner a votar a sus seguidores. En esa época ya funcionaban en la sede actual, la carrera 68 con calle 13.
Tienen 28 sedes repartidas en Colombia, Estados Unidos, Argentina, Chile y Brasil, tienen un canal de televisión, el ABN que se transmite en el canal 41 de Bogotá y transmisión HD por internet. A través del canal costarricense Enlace llegan a 120 países cada vez que transmiten allí su programa “Él Puede Hacerlo de Nuevo”.
Casa sobre la roca, Dario Silva
A finales de los años 70 Dario Silva era uno de los periodistas más conocidos en Colombia. Su noticiero, Noticolor, era una referencia de miles de personas. En 1982, una vez empezó el gobierno del conservador Belisario Betancur su ministro de comunicaciones Bernardo Ramírez ordenó el cierre del noticiero. Con esta medida Silva quedaba arruinado, perdería dos millones de dólares, todo su capital. Estaba tan desesperado que pensó en pegarse un tiro en la sien. Le dio unos días de espera a su suicidio y se dejó convencer de un amigo para ir a un grupo de oración. Allí, en una noche de 1983, su vida cambió: conoció a Ester Lucía Ángel, la mujer que terminaría prestándole la plata para pagar su deuda y con la que fundaría en 1987 Casa sobre la roca.
Más de tres décadas después la iglesia cuenta con 25 mil feligreses entre los que se cuentan influyentes líderes políticos como la embajadora en Francia, Vivianne Morales y figuras del deporte nacional como Radamel Falcao García y James Rodríguez. Cuentan con 32 iglesias distribuidas en todo el país, Estados Unidos, España y Panamá, cuenta con un colegio, el nuevo Gimnasio Cristiano con más de 6.000 estudiantes. Durante el plebiscito del 2016 fue de las pocas iglesias cristianas que apoyó el SI a los acuerdos de La Habana
Misión de las Naciones, John Milton Rodríguez, Cali
Hace 20 años, cuando John Milton Rodríguez empezó a pronunciar sermones en Cali, apenas un puñado de personas lo seguían. Hoy la congregación que el preside, Misión de las Naciones, la componen 25 mil caleños y funciona en la que fuera el tradicional bar Las Vallas en la via a Yumbo. Rodríguez es mucho más que un pastor. Es el presidente de la Universidad Cudes, es escritor de libros de superación personal y da charlas a nivel nacional y su iglesia pertenece al Grupo Apostólico, conformada por otras congregaciones que actúan sin reparos en política. El pastor lo hace desde el Movimiento Colombia Justa y Libres que creo para participar en las elecciones del 2018.
Su apoyo le sirvió al conservador Ubeimar Delgado para llegar a la Gobernación del Valle en el 2012 y en compensación éste le mantuvo durante sus cuatro años de mandato a Diego Ramiro Obando, miembro de la Asociación de Ministros Cristianos Evangélicos del Valle, como secretario de Desarrollo Social. Un activo importante que se vio en las elecciones del 2016 cuando el pastor logró llegar al Senado por el recién creado movimiento.
Fue un activo militante por el No al plebiscito de Santos por la Paz en octubre del 2016 y participó activamente en la renegociación de los acuerdos de la Habana con el gobierno de Juan Manuel Santos después de que el No ganara. Apoyó sin restricciones a Iván Duque.
El Centro Cristiano, José Satirio Dos Santos, Cúcuta
Llegó de Brasil con sus tres hijos y su esposa a principios de los años 80. Según su testimonio todo comenzó con una revelación: Dios le habló en sueños de que debería colonizar con su palabra. El lugar indicado para empezar era Cúcuta. Llegaron al barrio Guaimaral, en ese entonces era un barrio humilde. Vivieron en un carro abandonado los primeros meses. Su único refugio era la biblia y su única arma su palabra. Casi cuatro décadas después Satirio ha bautizado a más de 50 mil personas y creó una iglesia con capacidad para veinte mil personas. Sin duda es uno de los hombres más poderosos de Cúcuta hasta el punto de que su opinión es fundamental para poner alcaldes o gobernadores.
Sus iglesias llegan a países como Panamá, Ecuador, Perú, Argentina, Brasil y la India. A principios de este siglo intentó hacer una evangelización en un lugar tan lejano como Bután. Su ayuda fue fundamental para que Donamaris Ramirez París fuera elegido en el 2012 como alcalde de Cücuta. En el 2015 el entonces alcalde la condecoración Juana Rangel Cuellar, la máxima de la ciudad.
Su poder es tal que su yerno, Jorge Antonio Trujillo, casado con su hija Sulamita, se lanzó a la Presidencia de la república en el 2018 por el partido Todos somos Colombia.
