Por los intereses económicos, políticos y geoestratégicos que hay detrás del litigio de límites entre los departamentos de Antioquia y Chocó por el territorio de Belén de Bajirá, algunos políticos antioqueños no han comprendido que el Instituto Geográfico Agustín Codazzi (Igac) no ha modificado los límites entre los dos departamentos, establecido en la ley 13 de 1947, que creó el departamento del Chocó.
Los antioqueños siguen planteando de manera errónea que la reforma constitucional de 1944, que autorizó la creación del departamento del Chocó, que condicionó su creación que no modificará los límites con los departamentos vecinos se cumplió al pie de la letra.
Prohibición que no se cumplió, porque los límites entre Antioquia y Chocó si fueron modificados sustancialmente. Los estudios cartográficos que hizo el ingeniero Gustavo White Uribe, así lo demuestran, estudios que reposan en el archivo histórico de Antioquia y que fueron pieza clave en el trazado de límites que se contempla en la ley 13 de 1947.
Da la impresión que, ni las autoridades antioqueñas, ni sus congresistas se han dado a la tarea de investigar en los archivos de la antigua Oficina de Longitudes que se transformó en el Igac, los estudios sobre el nuevo trazado de límites entre los dos departamentos en aquella época. Por sus reiterados alegatos se concluye que tampoco han indagado en los archivos del Congreso de la República, los debates que se dieron de 1946 a 1947 sobre un nuevo trazado de límites en ambas Cámaras.
De acuerdo con las normas vigentes, el Igac no tiene competencias para modificar los límites entre los departamentos. Esa es una potestad del Congreso de la República. Por consiguiente, lo que ha hecho el Igac es un proceso de deslinde por petición de ambos departamentos. Los procesos de deslinde no son otra cosa que ir al terreno y verificar que los límites descritos en dicha ley son verídicos y eso es lo que ha hecho el Igac en estos 17 años.
Fue al terreno y verificó con delegaciones de los dos departamentos que los límites no han sufrido alteraciones en la región. En el 2003 por problemas de orden público no pudieron verificar la información pero si la lograron comprobar en el 2007 con delegaciones de los dos departamentos y se verificó que Belén de Bajirá, Macondo, Blanquiset y Nuevo Oriente están dentro del Chocó.
En el 2015 con la delegación de Antioquia porque la del Chocó no asistió alegando falta de garantía. Los funcionarios del Igac y los delegados antioqueños fueron a la región y comprobaron que los límites descritos en la ley no han tenido alteraciones. Igualmente que aquellas poblaciones están dentro del territorio del Chocó. Los delegados antioqueños no objetaron la verificación y la aprobaron de los hechos. Salir ahora las autoridades antioqueñas a decir lo contrario es una muestra que no quieren respetar la norma.
El informe técnico que el Igac en envió en el 2016 al Congreso de la República, dice que de acuerdo con los límites descritos en la ley 13 de 1947, dichas poblaciones pertenecen al Chocó. De manera que al no existir límites dudosos entre los dos departamentos, las Comisiones de Ordenamiento Territorial actuando en nombre del Congreso de la República, estudiaron el expediente y lo devolvieron al Igac para que acuerdo con lo estipulado en la ley 1447 del 2011 fije los hitos fronterizos y expida el mapa oficial del Chocó.
Es claro que las autoridades antioqueñas solo buscan deslegitimar la idoneidad técnica del Igac y satanizar a su director Juan Antonio Nieto Escalante para confundir a la opinión pública con la falacia que le ha quitado tierras a Antioquia. Una estrategia política mediática del gobernador de Antioquia Luis Pérez Gutiérrez, para impedir que el Igac cumpla con el debido proceso de expedir el mapa oficial del Chocó.
