El recorrido del político, abogado, profesor, diplomático, escritor, excandidato presidencial y exjefe negociador de los acuerdos de paz con las Farc en La Habana (Cuba) es innumerable.
Con todos los pergaminos, con toda la experiencia para dirigir a un país, con todo el carácter y rectitud que se necesitan para tener un gran líder, Humberto de la Calle, el hombre que tuvo todo el carácter y la responsabilidad de lograr un buen acuerdo para la terminación de la guerra en Colombia y poner en el imaginario de todo el país la idea de que la paz comenzaría a ser tangible, no fue elegido presidente en las pasadas elecciones.
Él logró la terminación de la guerra en Colombia respaldado por un gobierno que buscaba el mismo objetivo. De hecho, muchos comenzaron a pensar cómo sería la vida sin guerra después de tanto tiempo. Sin embargo, el hombre que nos salvó de la guerra no fue quien nos gobernó en la paz... es así como resulta que Humberto de la Calle tiene un perfil muy parecido al de Winston Churchill cuando fue el primer ministro británico durante el periodo de 1940-1945.
Churchill fue un político, estadista, historiador y escritor británico, conocido por su liderazgo del Reino Unido durante la Segunda Guerra Mundial. Él llevó al ejército británico a resistir las invasiones de los nazis y a evitar la conquista de los alemanes en el territorio inglés, evitando la expansión de su ideología y cargando con todo el peso de la guerra sobre el ejército británico. Además, Winston es considerado como uno de los grandes líderes de todos los tiempos, sin contar con que fue el único primer ministro británico galardonado con el Premio Nobel de Literatura.
Cuando ganó la guerra y el ejército nazi fue vencido con ayuda de los Estados Unidos, él se preparaba para unas elecciones en tiempos de paz. Y si bien tras la Segunda Guerra Mundial fue considerado un gigante político, no contaba ciento por ciento con todo el pueblo inglés. Aunque el papel de Churchill durante la guerra fue indiscutiblemente el mejor, lo cierto es que también tenía bastantes enemigos políticos y muchos le sacaban a relucir errores y derrotas militares que había tenido en el pasado. Sin embargo, eso no fue todo. Su pensamiento sobre algunas reformas en el sistema de salud y educación produjo desacuerdos entre varios sectores. De hecho, en esas elecciones en periodo de paz, Churchill fue derrotado, aunque más adelante, más especificamente en 1951, sus ideales, oratoria y carácter lo llevaron a la reelección.
Ahora bien, volviendo de nuevo al escenario local, Humberto de la Calle perdió las elecciones presidenciales de 2018 ante un ambiente electoral lleno de polarización y publicidad falsa, todo en el contexto de un pueblo fácilmente influenciable. Habría sido interesante ver la implementación de los acuerdos de paz bajo su batuta (ver a quien elaboró la receta haciendo su propio plato), lo cual seguramente se habría hecho sin cortinas políticas, ni intereses guerreristas.
No osbtante, con ese panorama en mente y con lo que ha pasado durante el mandato actual, de repente sea posible una victoria para De la Calle en las próximas elecciones, tal como ocurrió con Churchill. Tal vez en ese momento al pueblo le daba miedo vivir en paz. Tal vez tras tanto tiempo en guerra cambiar de escenario representaba un problema. Tal vez eso hizo desarrollar todo tipo de falsas noticias e incertidumbre electoral para llevar al ciudadano a continuar con lo que ya se conocía. Tal vez fueron ese tipo de hechos los que desviaron la atención de lo realmente importante... Sin embargo, en cuatro años las cosas pueden cambiar, sin dejar de lado que su experiencia no dejará de ser necesaria en un país que apenas está empezando a despertar y que necesita un buen líder.
Sea como sea, así como Winston Churchill terminó convertido en un héroe para Inglaterra y hoy en día aún se recuerda su legado, Humberto de la Calle también debería ser considerado como un héroe, al que además el país debería agradecer su papel al haber conseguido lo que nunca nadie había logrado.