Cuando Sajad Gharibii descubrió que sus 155 kilos de puro músculo y su metro 84 de altura le daban la fuerza suficiente para levantar más que su propio peso, se dedicó a entrenarse hasta sentirse invencible y empezó a subir sus fotos a Instagram. Como sus muslos y sus piernas no recibieron ninguna radiación, y, sin embargo, su contextura lucía igual a la del propio Hulk, este iraní de 24 años se concentró en alzar pesas, comer mucha proteína y Redbull para que la gracia que recibió siendo tan joven nunca se le fuera.
Ahora Sajad le anunció a sus 128.000 seguidores en las redes sociales que se ofreció ante el presidente sirio Bashar al Asad para ser un voluntario de su ejército y luchar contra el Estado Islámico. Sajad ha representado a su país en competiciones físicoculturistas desde que era pequeño y detesta al Estado Islámico. Por eso, aunque ha dicho que no tiene experiencia militar suficiente, dijo que está dispuesto a parárseles de frente a los yihadistas.