A la iniciativa, que se presentó por novena vez, solo le resta la conciliación y la sanción del presidente Gustavo Petro
El Congreso de la República les cumplió a las niñas, niños y adolescentes. Después de 8 intentos fallidos, la novena fue la vencida y la eliminación del matrimonio infantil y las uniones tempranas será una realidad en Colombia. La plenaria del Senado dio su voto positivo al último debate del proyecto que tiene como objetivo acabar con esta práctica nociva que sigue perjudicando a miles de menores de edad, en especial en zonas rurales y comunidades indígenas.
La iniciativa, de autoría de la representante por Cundinamarca Alexandra Vásquez y de la representante por Bogotá Jennifer Pedraza, con ponencia positiva de la senadora Clara López, deja un precedente histórico en la defensa de los derechos de las menores de edad y las mujeres del país, que por años han sido víctimas de esta forma de violencia.
La representante Alexandra Vásquez explicó que este proyecto “elimina del Código Civil el permiso de que niños y niñas mayores de 14 años se puedan casar con el consentimiento de los padres. Asimismo, este proyecto tiene un valor que nunca se había contemplado en los demás proyectos de ley del mundo, como lo confirma la ONU y la comunidad internacional, y es que tiene un enfoque preventivo y pedagógico con la creación del Programa Nacional de Atención Integral a Proyectos de Vida para Niños, Niñas y Adolescentes. Entonces, tiene un enfoque de establecer políticas públicas pensando en sus proyectos de vida”.
En el mismo sentido, recordó que este logro también se lo deben a las organizaciones sociales, quienes desde años atrás han estado golpeando las puertas en Cámara y Senado, y han generado conciencia ante la opinión pública. Igualmente, hizo énfasis en que este proyecto también prohíbe las uniones tempranas y matrimonios cuando las dos partes son menores de edad.
“Muchas personas preguntaban por qué también se considera a los jóvenes en esta iniciativa, y yo creo que dos menores planeando un matrimonio no es viable. Es importante mirar más allá y permitirles que, en algún momento, puedan visualizar un futuro con metas personales como una carrera profesional, estudios o proyectos de crecimiento”, agregó.
El matrimonio infantil, según estudios y expertos, implica riesgos graves y duraderos, especialmente para las niñas. Riesgos en la salud física y mental, limitación de oportunidades educativas y laborales, mayor riesgo de violencia y abuso, reproducción del ciclo de pobreza y afectación en el desarrollo social y personal.
“Celebro el apoyo del Senado al proyecto #SonNiñasNoEsposas, esta ley es crucial para proteger los derechos de niñas y adolescentes, garantizar su bienestar y promover su pleno desarrollo”, concluyó Alexandra Vásquez.
En 2015, aproximadamente el 28% de las mujeres en Colombia contrajeron matrimonio o establecieron una unión antes de cumplir los 18 años. A nivel global se estima que cada día ocurren alrededor de 33.000 casos de matrimonios infantiles o uniones tempranas (MIUT). En cuanto a la incidencia de matrimonios infantiles, Colombia ocupa el lugar 20 a nivel mundial en casos de niñas casadas o en unión antes de los 15 años, una posición alarmante que subraya la importancia de este proyecto que está a semanas de ser sancionado y ser ley de la República. Colombia y Argentina son los únicos países en Latinoamérica que permiten este tipo de uniones, hoy nuestro país sale de esa penosa lista.