Colombia es un país que ha estado marcado por la violencia, es una frase con la que comienzan gran cantidad de escritos, pues muchos autores han tratado y tratan este tema a lo largo de los años. El narcotráfico, las épocas de guerra, bombas, un millón de pesos por cabeza de policía ya hacen parte de la cultura general de nuestras vidas, pero ¿realmente es un tema que se haya quedado en el pasado o sigue presente hoy en día en el diario vivir de los Colombianos?
Por otro lado Sabemos que el Estado es incapaz de llegar a todos y cada uno de los rincones de Colombia, por ello algunos lugares están abandonados del poder público, pero más que eso de su seguridad, entonces si el presidente y sus subalternos no van a cuidarnos entonces, ¿quién podrá defendernos? Pues aquí es donde comienza la historia pero realmente tiene dos vertientes que de una manera u otra terminan entrelazándose, el narcotraficante que tiene ambición de poder, y la persona que entra a un grupo armado para defenderse a sí mismo y a su familia.
A causa de la poca o nula presencia del Estado en ciertas zonas, en mayor parte rurales, estos grupos armados denominados grupos al margen de la ley comienzan a establecer un orden y un gobierno (a su manera) para solucionar los problemas de las personas, logrando así el respeto de los habitantes de las zonas en cuestión, claro por si no tengo casa y me construyes una, si no hay escuela la levantan, si no hay hospital lo instalan, si tengo un problema de seguridad me defienden, ganándose así el aprecio de las personas, al punto de cuidarlas, bien sea escondiéndolos de la policía, dándoles comida o un lugar donde dormir.
Con el tiempo su forma de conseguir recursos fue variando, y comenzaron con lo que día a día era temas de los medios de comunicación en años pasados, es decir: secuestros, extorsiones, asesinatos, tráfico ilegal de estupefacientes (droga), entre otros y aunque sembraron el terror en las clases altas, aún seguían ayudando a las personas de las zonas abandonadas, asemejándose al famoso Robín Hood de los cuentos infantiles con su famoso “quitarle a los ricos para darle a los pobres”
Siguiendo este camino llegan a ser grupos realmente grandes y de tanto poder que en algunas zonas donde si hay espacio para el Estado, este se encuentra tan amedrentado por decirlo de alguna manera por estos grupos armados, que inclusive hablan con ellos para pedirles ayuda o inclusive permisos para poder accionar, pues si nos vamos al sentido estricto de la palabra gobierno significa: “Conjunto de personas y organismos que gobiernan o dirigen una división político-administrativa (estado, autonomía, provincia, municipio, departamento, etc.).” y esto no es precisamente el papel que había tomado el Estado en estos lugares, por lo que el poder pasa a manos de personajes como: Las Farc, el Eln, o en sus tiempos pablo escobar y su grupo “los extraditables”.
Entonces podemos observar que se presenta una dualidad muy grande en nuestro país pues una parte los repudia y otra los alaba, pues hoy en día todo la vida de algunos narcotraficantes se usa para comerciar pues hay recorridos de pablo escobar dentro de las guías turísticas que le venden a los extranjeros, entonces que es realmente lo que pasa en Colombia si todo el tiempo parecemos ofendidos pero seguimos impulsando ese pensamiento del país de las drogas.
Es sumamente curioso que si los cantantes extranjeros vienen a visitarnos y usan camisetas con el rostro de Pablo Escobar o le llevan flores a su tumba, nos indignamos sobre manera y hacemos un escándalo, pero al salir del trabajo, la universidad o el colegio buscamos la forma más rápida de llegar a casa para sentarnos delante de la televisión y no perdernos ni un solo minuto de las “increíbles” producciones Colombianas que reflejan todo lo bonito de nuestro país.
El patrón del Mal, Sin tetas no hay paraíso, alias JJ, sin tetas si hay paraíso, el cartel de los sapos, entre muchas otras que los ponen como los protagonistas y las grandes estrellas que nos llevan a pensar ¿Qué son realmente ellos para Colombia? ¿Héroes o villanos?
