“Las iniciativas de memoria del Ejército, de la Policía y de la Fiscalía implican un gran desequilibrio en relación con otras iniciativas públicas de memoria no solo por los grandes presupuestos de los que disponen sino por el gran espacio institucional que tienen para desarrollarlas. En estas nuevas iniciativas —que muy legítimamente están llevando a cabo el Ejército y la Policía— hay unos fuertes vacíos y una intencionalidad ideológica muy preocupante para la sociedad colombiana”.
Así lo aseguró el comunicador social, literato e investigador William López Rosas, profesor asociado del Instituto de Investigaciones Estéticas (IIE) y coordinador de la Maestría en Museología y Gestión del Patrimonio (MMGP) de la Universidad Nacional de Colombia (U.N.C.), quien, además de estudiar a profundidad la relación existente entre las instituciones públicas de la memoria —surgidas en el marco de la Ley 1448 o Ley de Víctimas— y los museos en el país, ha venido promoviendo la primera Ley de Museos y Memoria para el contexto colombiano.
“El año pasado en la Cátedra William Bullock, que presenté en el Museo Universitario de Arte Contemporáneo de la UNAM, había hecho una reflexión y había presentado al público de ese evento un panorama y una crítica, es decir, un balance de las instituciones de la memoria que eventualmente surgen o se consolidan dentro de la Ley de Víctimas, la Ley 1448; me estoy refiriendo a la Casa Museo de la Memoria de Medellín, al Centro de Memoria, Paz y Reconciliación de Bogotá, y también al Museo Nacional de la Memoria, del Centro Nacional de memoria Histórica y, eventualmente, a la Red de Lugares de Memoria, y allí mostraba las inconsistencias y las grandes debilidades que en este momento tienen esas instituciones”, reveló el experto.
Las declaraciones surgieron hace pocos días, cuando se le indagó por los resultados de su intervención en el III Simposio Internacional de Pesquisa en museología (III SInPeM), una bienal académica que en torno a este tema organiza el programa de Posgrado Interunidades en Museología de la Universidad de São Paulo (USP), en Brasil, al que fue invitado junto al geógrafo y museólogo Edmon Castell, también profesor del IIE y de la MMGP de la U.N.C.
Específicamente, la conferencia que López Rosas presentó recientemente durante el desarrollo del III SInPeM, denominada “Reporte sobre la situación de las instituciones de la memoria en Colombia: hacia una ley de museos”, versó sobre las iniciativas que en esta materia están ejecutando instituciones públicas colombianas como la Fiscalía, el Ejército y la Policía Nacional, y de cómo, según sus palabras, hay una especie de quiebre muy fuerte entre la producción museológica y el desarrollo de los museos.
Al respecto, explicó: “Los últimos museos que se están haciendo en Colombia se hacen sin museología o se empiezan a hacer sin museología como el Museo Nacional de la Memoria o como el Centro de Memoria, Paz y Reconciliación o como estas iniciativas de memoria de la Fiscalía, del Ejército y de la Policía. No hay pensamiento museológico allí. Entonces, es una situación ambigua pero muy interesante al mismo tiempo y digo e insisto que la producción museológica es muy interesante”.
Por su parte, el profesor Castell —quien también concedió recientemente una breve entrevista sobre su actuación en la USP— intervino en el III SInPeM con una presentación denominada La imaginación museográfica en la que explicó cómo esta imaginación hace referencia a la capacidad y sensibilidad específicas para sentir, comprender, pensar y hacer museografía, entendiendo, evaluando y reconstruyendo “los lenguajes, procesos y culturas museográficas”.
"La imaginación museográfica comparte con el pensamiento empático la capacidad de ver el mundo de los museos desde la perspectiva propia y las perspectiva de los otros. Como una sensibilidad, una mirada para reconocer otras museografías desarrolladas al margen de las instituciones museales, como una categoría que permite acceder a otras culturas museográficas, desaparecidas o no, de los museos”, argumentó Castell.
En relación con el concepto de “culturas museográficas” manifestó que estas aluden a las prácticas culturales específicas de cada museo para la representación y creación de valor cultural a través de la gestión museográfica.
Un laboratorio latinoamericano de museos
Este será uno de los productos futuros del convenio existente desde hace cinco años entre el programa de Posgrado Interunidades en Museología de la Universidad de São Paulo y la Maestría en Museología y Gestión del Patrimonio de la UNC, convenio del cual se derivan los simposios internacionales de investigación en museología y en los que también tienen espacio los estudiantes y egresados de los dos programas académicos de posgrado.
“Lo que viene es la conceptualización y la puesta en marcha de un laboratorio latinoamericano de museos, que es la plataforma que hemos acordado entre los dos programas, entre los profesores de los dos programas, para sistematizar y poner en marcha proyectos de investigación más sistemáticos y más poderosos”, aseguró el profesor López Rosas, coordinador de la MMGP.
Y concluyó: “Yo vine muy contento (del SInPeM) porque las presentaciones que hicieron, en la mayoría de los casos, los ponentes que eran casi todos o egresados o estudiantes de la maestría en museología de la USP fueron, por un lado, de un altísimo nivel académico, de un altísimo rigor histórico, teórico, conceptual, y por el otro, con presentaciones muy sugestivas. Entonces, lo que yo vi me augura un desarrollo de la museología muy poderoso”.
