La Fundación Paz y Reconciliación presentó su segundo informe sobre violencia electoral. Ahí se evidencia un grave aumento de los casos ocurridos en el país.
El informe dice que entre el 27 de octubre de 2018 y el 17 de julio de 2019 se registraron 83 hechos que dejaron un total de 129 víctimas.
Según la fundación, una de las principales causas de lo sucedido es la violencia como mecanismo de competencia política en varias regiones del país.
Y es que el perfil de las víctimas, muestra el informe, son funcionarios públicos de elección popular: 38 concejales, 9 senadores, 7 alcaldes, 37 precandidatos, 38 pertenecen a partidos de oposición y afines, 25 a la coalición de gobierno, 22 hacen parte de partidos independientes y en un 32% de los casos se desconoce su alineación política.
Este panorama es preocupante y más aún de cara a los comicios de octubre.
Las ideas no pueden seguir siendo amenazadas y asesinadas.
Hay que rechazar todo tipo de violencia y eso incluye la que funciona como mecanismo de competencia política.
Es claro que el gobierno debe activar mecanismos de protección frente a estos hechos, pero de nada servirá mientras el respeto y la tolerancia por la vida y el pensamiento de los demás siga sin existir en nuestra conciencia y en nuestro imaginario social.
Tenemos que propender por una educación que promueva un comportamiento ético, dar ejemplo con nuestras acciones y elegir gobernantes que no sean un símbolo de corrupción y cinismo y, por ende, una inspiración para los bandidos.
Tolerancia y ética es lo que necesitamos.
No más corrupción, no más víctimas, no más violencia.
Paz en este proceso electoral y para Colombia.