VIDEO. Puntos de vista. Semana con dos hechos muy negativos. El primero, la firma de parte del secretario ordenando pagarle a la firma que hace los pasaportes. Ese es un contrato gigantesco de 600.000 millones. El punto oscuro del asunto es quién lo autorizó a hacer eso. Ahí hubo algo oscuro, que sí lo había hecho el canciller encargado, que no lo había hecho, que él tenía la autorización, en fin. Eso muestra que la solidez jurídica del Estado colombiano nunca ha existido, es un estado colapsado, las normas jurídicas no se aplican, se aplican de manera torcida. Es un hecho bochornoso que muestra a las claras que el Estado colombiano no es un estado organizado, no es un Estado de derecho ni de lejos.
El segundo hecho tiene que ver también con el grado de desorganización de las fuerzas militares, del grado de infiltración que tienen, y fue el soldado infiltrado de la guerrilla que asesinó a dos suboficiales y a un soldado en el Putumayo. Se fugó por el río y finalmente fue dado de baja por la policía. Siempre ha habido ese tipo de infiltraciones y de tratos tortuosos entre el ejército y la guerrilla, pero ya poder atentar contra los mismos soldados en las bases militares muestra el grado de desorganización del aparato militar y la falta de control.
Yo creo que el balance que se puede hacer de la sociedad colombiana es que vamos muy a la deriva, con muchísimas dificultades, y la situación mundial es muy grave económicamente, la tercera guerra mundial está en cernes. Hay mucho desorden sobre los cielos, como dijeran los poetas chinos