En la noche de navidad mientras muchos llenaban sus mesas con buñuelos, natilla y arroz con leche, el pediatra Spencer Rivadeneira recibía a un cadavérico niño Wayúu de dos años con los niveles de azúcar casi en cero, hinchado y con un cuadro clínico de desnutrición severa. El bebé llevaba un mes con diarrea y era asistido por un piache, médico de la comunidad Wayúu. Al parecer la mamá empezó a notar que los medicamentos elaborados a base de raíces, cortezas y flores no surtían efecto mientras la salud del niño se deterioraba. La señora decidió buscar ayuda pero cuando llegó al hospital Nuestra Señora de los Remedios de Riohacha poco pudieron hacer los médicos. El niño murió en medio del jolgorio de las fiestas de fin de año sumándose a la lista de 26 inocentes más que corrieron la misma desgracia en Riohacha, Manaure y Dibulla.
A pesar del Plan de Alimentación y Nutrición (PAN) que lanzó el gobernador detenido en la Picota, Kiko Gómez, y del programa estrella de la Primera Dama María Clemencia de Santos, De cero a Siempre cuyo ejecutor es el ICBF, los niños guajiros padecen hambre. Los recursos por 37 mil millones de pesos asignados por el gobernador, se esfumaron; pero algo más terrible, en diciembre aparecieron más de mil cajas de leche vencida que formaban parte del programa De cero a Siempre para ser repartidas entre los niños de la Guajira. Las bebidas que tenían fecha de vencimiento de marzo y abril del 2013 fueron abandonadas por una camioneta roja el sábado 14 de diciembre en el sector de la comunidad 10 de Riohacha. Según cuentan los niños del barrio, el vehículo pasó y las botó.
El director del ICBF en La Guajira, Leandro Alberto Sampayo responsable de la ejecución del programa, dijo entonces que se investigarían las referencias de las leches para identificar a los operadores responsables de su distribución. A esta tragedia infantil hay que sumarle el hecho de que en el último semestre de 2013, tres mil niños de pre-escolar y primaria de las zonas rurales estuvieron sin servicio de restaurantes escolares. Estudiando y acostándose con hambre.
Foto: www.hoyesnoticiaenlaguajira.com
El coordinador de veedurías para el Caribe, Luis de la Hoz, denunció en el periódico Diario del Norte que los paquetes alimentarios del PAN se están entregando a personas pudientes que los recogen en carros lujosos, así como a representantes de políticos en campaña. “Tenemos evidencias de dirigentes políticos con aspiraciones que están direccionando los paquetes hacia sus electores.” , dijo el abogado de la Hoz.
Sin desparpajo funcionarios del ICBF dicen conocer la situación y estar actuando para corregir el problema; pero como ellos, las autoridades locales como representantes de la Procuraduría de familia y la Defensoría del pueblo se han desatendido el asunto. NO se asombran cuando se les llama y se les pone en consideración el mortal caso: “Ah, si. Ya sabíamos”, fue la simple respuesta de un funcionario del ICBF a Las2Orillas.
El 7 de diciembre el ministro de Interior Aurelio Iragorri estuvo en la región donde firmó un mandato con las autoridades indígenas en el que se comprometió a cumplir las peticiones del pueblo Wayúu en temas de salud, educación, ley de salvaguarda y derechos humanos. Mientras tanto los indígenas de la Guajira siguen a la espera, enterrando sus niños.
