La Palabra Halloween, es usada como tal por primera vez en el siglo XVI y proviene de una variación de la expresión escocesa, inglesa “All Hallows Even", que traduce como “víspera del día de todos los Santos”.
El Halloween, tiene su origen en una festividad de los Celtas (antiguos habitantes de Irlanda), conocida como Samhain que deriva del irlandés antiguo y significa Fin del Verano. En el Samhain se celebraba el final de la temporada de cosechas en la cultura celta y era considerada como el «Año nuevo celta», que comenzaba con la estación oscura.
Los antiguos celtas creían que la línea que une a este mundo con el otro mundo se estrechaba con la llegada del Samhain, permitiendo a los espíritus (tanto benévolos como malévolos) pasar a través de alguna dimensión y llegar a nuestros hogares. Los ancestros familiares eran invitados y homenajeados mientras que los espíritus dañinos eran alejados.
La tradición de las calabazas se originó en la leyenda irlandesa de Jack O’Lantern, un hombre que invitó al Diablo a beber a su casa en la noche de todos Santos, y finalmente acabó en el infierno.
En Escocia los niños cantan o cuentan chistes o historias para ganar dulces. Las chicas jóvenes pelan una manzana frente al espejo, alumbradas únicamente por una vela o candelabro. Si logran pelar la cáscara en una sola tira, el espejo les mostrará la imagen de su futuro esposo.
Los disfraces y máscaras
Se cree que el uso de trajes y máscaras se debe a la necesidad de ahuyentar a los espíritus malignos. Su propósito era adoptar la apariencia de un espíritu maligno para evitar ser dañado. En Escocia los espíritus fueron suplantados por hombres jóvenes vestidos de blanco con máscaras o la cara pintada de negro.
El Samhain también era un momento para hacer balance de los suministros de alimentos y el ganado para prepararse para el invierno. Las Hogueras también desempeñaron un papel importante en las festividades. Todos los otros fuegos se apagaban y en cada hogar se encendía una hoguera en la chimenea. Los huesos de los animales sacrificados se lanzaban a la hoguera.
Otra práctica común era la adivinación, que a menudo implicaba el consumo de alimentos y bebidas, e incluso en Asturias se celebraban banquetes en las tumbas de los antepasados.
La celebración
Hoy en día, el Halloween es una de las fechas más importantes del calendario festivo estadounidense y canadiense. Algunos países latinoamericanos, conociendo aún esta festividad, tienen sus propias tradiciones y celebraciones ese mismo día, aunque coinciden en cuanto a su significado: la unión o extrema cercanía del mundo de los vivos y el reino de los muertos.
En Europa son muchas las ciudades en las que los jóvenes han decidido importar el modo con el que Estados Unidos concibe Halloween celebrándolo con fiestas y disfraces. Aunque en algunos lugares, como Inglaterra, la fiesta original se ha arraigado de nuevo.
¿Que ha pasado con la festividad?
El hecho de que esta fiesta haya llegado hasta nuestros días es, en cierta medida, gracias al enorme despliegue comercial y la publicidad engendrada en el cine estadounidense. Las imágenes de niños norteamericanos correteando por las oscuras calles disfrazados de duendes, fantasmas y demonios, pidiendo dulces y golosinas a los habitantes de unos oscuros y tranquilos barrios, han quedado grabadas en la mente de muchas personas.
En esa noche los espíritus visitaban las casas de sus familiares y para que los espíritus no pertubaran a los aldeanos debían poner una vela en la ventana de su casa por cada difunto que hubiese en la familia. Si había una vela en recuerdo de cada difunto los espíritus no molestaban a sus familiares, si no era así los espíritus les perturbarían por la noche y les harían caer en terribles pesadillas.