Hace unos días recordamos con algunos compañeros lo que había pasado con esas movilizaciones que, aunque muy bajas, habían logrado al menos iniciar un proceso de despertar de conciencia en la población migrante colombiana. La pregunta rondaba directamente en ¿qué resultados se habían logrado con estos actos', ¿qué había pasado con esto?
Desde que tengo uso de memoria, algunos “líderes y lideresas”, aquí en Barcelona, decían que solo aparecemos los mismos 15 gatos de siempre. A nadie le duele ni le gusta participar cuando tiene que dar la cara porque “qué dirá el cónsul”, “quedamos marcados y no os vuelven a dar nada”, “que oso que nos vean frente al consulado". En fin la verdad sea dicha, no hay compromiso por el bienestar común en los colombianos que vivimos y trabajamos en el exterior. Venimos siendo los mismos con las mismas. Ni siquiera esa izquierda de siempre, ni siquiera esa tan tradicional que ha trabajado en y por la paz, ve con buenos ojos el pronunciarse de frente a un consulado para mejorar las condiciones de vida de la diáspora porque ha recibido sus “ayuditas” en los eventos que organizan.
Aquí un repaso histórico de las acciones desde la sociedad civil:
1. Diciembre 18 de 2014 - por la pérdida de la segunda curul.
La mejor movilización fue la de New York. Personas de todas las corrientes políticas participaron frente al consulado. Un valor añadido allí fue una supuesta doble tributación, que se gestionaba para personas en Estados Unidos, pero no era real. De esta movilización no quedo nada positivo, tan solo ver la verdadera cara de Jaime Buenahora, que después de trabajar en el acto legislativo 01 de 2013, que dio la segunda curul, realizo la sustentación final de este “traslado” a los Sanandresanos raizales, después de que el Tribunal de la Haya dictamino la perdida de plataforma continental en las Islas, a favor de Nicaragua. Nuestra “excelentísima Canciller” perdió el caso, Parece que lo lleva en los genes desde su abuelo.
2. Marzo 6 2015 - MIRA en solitario convoca por la pérdida de la segunda curul.
Después de que algunos de sus líderes regionales en el mundo y en especial en Barcelona, Madrid, León y Sevilla, no creyeran que se iba a retirar la curul, MIRA como movimiento político organizo una movilización para tratar de parar el exabrupto. Fue una movilización muy pobre, partidista y tomada como una “copia” de la del 18 de diciembre. MIRA hasta esa fecha no había hecho actividades conjuntas con otros grupos de la sociedad civil, dado caso su historia con las acusaciones en la campaña a Senado y Cámara.
De estas dos movilizaciones no quedó nada. De hecho, ni siquiera muchos de los que fueron candidatos por la circunscripción de los consulados se hicieron presentes en la primera, ni en la segunda. Quienes sí participaron, y sé que les dolió en gran manera esta perdida, fueron Zoilo Nieto y a Jorge Muñoz, que sí conocen de primera mano el desarraigo y el abandono del Estado colombiano con sus connacionales en la diáspora. Se perdió la segunda curul y nadie dijo nada.
3. Febrero 9 - por el incremento en el 10% del impuesto de timbre.
Desde Madrid, un grupo muy importante de la sociedad civil organizó una acción para generar la inconformidad de tener el segundo pasaporte más costoso del mundo, el más caro del hemisferio americano. Era la primera vez que MIRA, junto a su representante, se juntaban con otros líderes para un proceso de acción ciudadana. El ejercicio estuvo interesante. Se pactó en el Restaurante la Rochela, que esta movilización seria de la sociedad civil, sin ningún miramiento partidista. Que se recogerían las firmas necesarias para el objetivo y se entregaría un manifiesto en los consulados para que se hiciera un retiro total del Impuesto de Timbre.
Lo malo, fue, que nunca se organizó un comité coordinador de recolección de firmas, con lo cual solo un grupo integró ese proceso y fueron los voluntarios de MIRA, quienes asumieron esa responsabilidad. Ellos y unos pocos miembros de la organización recogieron más de 26.800 firmas, que fueron el sustento de este manifiesto.
Desafortunadamente, en el transcurso del proceso se presentaron muchos inconvenientes, malos entendidos, malas interpretaciones. Uno de los muchos malos entendidos frente a la recolección de firmas, fue el logo de MIRA en algunos sitios de España, con lo cual se desvirtuaba el principio de que era una movilización de la sociedad civil.
Dentro del proceso, un “líder” que dice que no lo es pero que si lo es porque se pone frente a algunos temas, dio clases magistrales de cómo no se debe gestionar un proceso con la sociedad civil. Lanza en ristre, en su grupo privado de Whasapp, conminó a muchas personas a dañar el proceso sin tener en cuenta que la gran mayoría eran voluntarios de este movimiento político. Lo que más ironía da es que muchos de los que criticaban, incluyendo este “líder”, no recogieron ni una firma, ni la de ellos. Escuché audios donde alababa la buena voluntad de la representante Ana Paola Agudelo, y pasadas una horas, denigraba de ella, sin el menor respeto por su condición de mujer.
De esta acción tampoco salió absolutamente nada en beneficio de la diáspora. Se han enviado más o menos 25 derechos de petición, que no han sido contestados. El Ministro de Hacienda no le interesa lo que un grupo de colombianos que viven y trabajan en el exterior, puedan patalear. El impuesto quedo en el 40% y seguirá subiendo cada fin de año. Lo que sí ha salido es para mal. Se ve que una supuesta “plataforma de la sociedad civil” se convirtió en la marca registrada de un particular, para su beneficio propio, y según un audio, él puede hacer con ella lo que le plazca. Se disfrazó de interés común, lo que es en verdad una empresa que si bien es cierto aun no despega a vender publicidad en una página web, ha engañado a muchas personas de la diáspora, haciéndoles creer que se trabaja por los colombianos en el exterior “sin interés alguno” .
Exactamente igual que con la Mesa Nacional de la Sociedad Civil para las Migraciones, que se apropió un grupo de personas pasando por encima de 5 millones de colombianos que viven y trabajan en el exterior. La historia se repite, y aún no se logra nada. Se sigue con el individualismo, con ese afán de protagonismo y lucro personal, sin tener en cuenta a la gente.
Queda un grupo muy interesante, que hasta la fecha ha logrado ejercer presión ante temas como la repatriación de cadáveres de colombianos en riesgo de exclusión social, que en el cono sur, (Chile, Brasil, Argentina y Bolivia) se vienen presentando los últimos meses. De igual manera se logró que el Cónsul de Egipto le diera la nacionalidad Colombiana a una menor, con todos los permisos de padre y madre, pero se negaba a hacerlo “por qué no había sistema”.
Esta red Mundial se denomina Colombianos Berracos Internacional, que empezó en Chile, pero que a fecha de hoy cubre Europa, África, Estados Unidos, Centroamérica y el Caribe. Un grupo de personas que a pesar de la distancia y la diferencia de criterios, trabaja con respeto, con ganas y ha logrado ejercer por varias vías, el ser una RED integral de Colombianos en el Exterior.
